Según el Banco Mundial, si la guerra comercial entre EE.UU. y China empeora, más de 30 millones de personas en el mundo podrían caer en la pobreza.
PUBLICIDADSi la guerra comercial entre Estados Unidos y China empeora, más de 30 millones de personas de todo el mundo podrían caer en la pobreza.
Este es el peor escenario según el Banco Mundial a finales de 2019, un año en el que las tensiones llevaron a una guerra comercial sin precedentes.
El Fondo Monetario Internacional afirma que serán los más débiles los que paguen las consecuencias.
Para Kristalina Georgieva, directora del FMI, "el comercio es bueno para el crecimiento, es bueno para el empleo y, lo que es importante, es bueno para la reducción de la pobreza. Un hecho del que no hablamos mucho es que las personas más afectadas son las personas con bajos ingresos, porque son los bienes que compran los que se vuelven más caros en ausencia del libre flujo del comercio mundial".
Al final somos nosotros los que pagamos los aranceles. Son como un impuesto a las ventas oculto, uno que no aparece en el ticket de compra.
Por ejemplo el arancel impuesto a las lavadoras por el Presidente de EE.UU. Donald Trump encareció los precios un 12%.
La última ronda de aranceles a los productos chinos podría costarle a un hogar estadounidense 1.000 dólares al año según J.P. Morgan.
El FMI calcula que para 2020, los aranceles ya impuestos o anunciados podrían reducir el Producto Interior Bruto mundial un 0,8%. El equivalente del tamaño del PIB de Suiza.
Con los precios al alza muchos compradores se lo pensarán dos veces a la hora de gastarse el dinero, algo que afectará al gasto total de consumo, la columna vertebral de la economía estadounidense.
Con las empresas sucede lo mismo. Contienen el gasto e intentan encontrar la manera de reducir costos reduciendo empleos.
Sucede algo similar con las empresas: contienen el gasto, las contrataciones y, en algunos casos, intentan encontrar la manera de reducir costos reduciendo empleos.
Arancha González, Directora Ejecutiva del Centro de Comercio Internacional en Ginebra afirma que hoy en día "multilateralismo está amenazado de dos maneras diferentes. Primero, en lo que significa el multilateralismo, que es un sistema de cooperación internacional. Pero también hay un ataque a reglas específicas del comercio internacional que restringen el unilateralismo, no porque uno se sienta débil, sino porque piensa que, si se centra en sí mismo, va a ser más fuerte. Pero hoy en día la elección no es entre multilateralismo o bilateralismo, esa es una dicotomía equivocada. Hoy tenemos que elegir entre el orden y el caos. Multilateralismo significa orden, un sistema, reglas, previsibilidad, transparencia. El unilateralismo hoy en día significa el caos en nuestras economías.
El Centro de Comercio Internacional afirma que el sistema de comercio mundial necesita cambiar. Pero sus defectos tienen que abordarse de una manera cooperativa a través del