Los líderes de la Unión Europea advierten de que no serán rehenes de las amenazas de Turquía y ofrecen nuevas ayudas al Gobierno heleno.
PUBLICIDADEuropa no negociará con Turquía con el cuchillo al cuello: es, en esencia, el mensaje que los líderes europeos han enviado a Ankara durante su visita a Grecia. Los presidentes de la Comisión, el Consejo y el Parlamento Europeos han viajado a Orestiada, uno de los puntos calientes de esta crisis migratoria en ciernes, para brindar su apoyo y solidaridad al Gobierno heleno. Desde que Ankara abrió sus fronteras, miles de migrantes buscaban de noche y de día vías para entrar en Grecia.
El primer ministro griego, que esperaba como agua de mayo el apoyo de la UE, ha advertido de que Europa no será rehén de las amenazas de Turquía: "Lo que sucede- ha afirmado Kyriakos Mitsotakis- es un intento flagrante por parte de Turquía de utilizar a personas desesperadas para impulsar su programa geopolítico y desviar la atención de la horrible situación en Siria. Y Europa no consentirá ser chantajeada por Turquía con los refugiados. Estamos dispuestos a apoyar a Ankara en su gestión de los migrantes y a la hora de encontrar una solución a la crisis en Siria, pero no en estas circunstancias."
Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, ha anunciado que Frontex prepara un equipo de intervención rápida para proteger las fronteras marítimas y terrestres griegas y ha prometido nuevas ayudas a Grecia para la gestión de la migración: "Ni Turquía es el enemigo ni las personas son medios para alcanzar un objetivo. Todos haríamos bien en recordar ambas cosas en los próximos días. Quiero agradecer a Grecia que haya sido el "escudo europeo” en estos momentos”.
Por su parte, Charles Michel, presidente del Consejo Europeo, ha pedido reacciones proporcionadas y respeto: "La protección de las fronteras es esencial y, por supuesto, es crucial actuar de manera proporcionada y mostrar respeto por la dignidad humana, mostrar respeto por el derecho internacional".
La de Michel, ha sido la única alusión velada a las imágenes que se están viendo estos días en el Egeo, como la de la muerte de un niño sirio en un naufragio, los vídeos de guardacostas griegos intentando volcar lanchas llenas de personas o las de los periodistas apalizados por la extrema derecha en Lesbos. Los líderes europeos tampoco han abordado la decisión de Grecia de suspender las solicitudes de asilo durante un mes.