A las dos de la madrugada del domingo serán las tres. Una hora menos de cuarentena, aunque el día será "más largo".
PUBLICIDADA pesar de los intentos por erradicar esta práctica, el domingo 29 de marzo pasamos al horario de verano. El que podría ser el penúltimo cambio de hora, tiene lugar en el contexto sin precedentes de la cuarentena masiva en todo el Continente para intentar frenar la epidemia de COVID-19.
A las dos de la madrugada serán las tres. En estos tiempos de confinamiento por la pandemia de coronavirus, el cambio de hora, que siempre afecta algo a nuestras costumbres y nuestro estado físico y de ánimo, hará que "perdamos" una hora de sueño el domingo y que tengamos luz de día hasta más tarde.
La Comisión Europea estuvo a punto de llevarse por delante el cambio de hora en 2019, sin embargo el Parlamento Europeo pidió que la decisión se retrasara hasta 2021 para resolver cuestiones técnicas.
La Comisión decidió acabar con el cambio de hora después de una consulta pública en la que el 80% de los 4,6 millones de participantes se mostraron favorables.
El mes que viene, si no se retrasa con el contexto actual, los países miembros deberían comunicar a la Comisión Europea si desean permanecer en horario de invierno o en el de verano.
Cada uno decidirá lo que le conviene más. Si hay muchas discrepancias, los husos horarios se podrían volver bastante complicados en el Viejo Continente. El objetivo sin embargo es ponerse de acuerdo sobre husos horarios coherentes.
Actualmente hay tres husos. Con el horario de invierno o "standard", el de Greenwich (GMT) para Irlanda y Portugal. El GMT+1, una hora más que utiliza la mayoría de la UE y el GMT+2, dos horas más en Finlandia, los países bálticos, Grecia y Chipre.
Con el horario de verano todos los paíse se adelantan una hora. Por ejemplo París, está en GMT+2 hasta octubre.
Si este mes de abril cada uno decide quedarse en horario de invierno y de verano y hay muchas diferencias, esta imagen más o menos lógica, se volverá un mosaico bastante complicado.
La otra opción es que los países miembros consigan llegar a un acuerdo en el seno del Consejo Europeo para una solución armonizada. El Consejo todavía no tiene una posición común.
Si no hay cambios, los países que hayan decidido quedarse con el horario de verano, cambiarán de hora por última vez en marzo de 2021.
Los países que hayan decidido quedarse en el horario de invierno cambiarán de hora por última vez en octubre de 2021.
España ha debatido largamente la cuestión del horario, ya que al estar tan al oeste podría alinearse con el huso horario de Greenwich (GMT). El anterior jefe del Gobierno Mariano Rajoy era favorable, sin embargo los responsables políticos actuales han rechazado esta opción.
Los expertos aconsejan a España permanecer en horario de invierno, sin embargo una encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) estimaba que la mayoría de españoles prefieren el horario de verano.