Ada Zanussi tiene 103 años y ha superado la enfermedad, contra todo pronóstico. Sus armas: "coraje, fuerza y fe".
Ada Zanussi es una fuerza de la naturaleza. Con 103 años, esta italiana ha plantado cara al coronavirus y, contra todo pronóstico, le ha vencido. Antigua trabajadora de una fábrica textil, vive en una residencia de la región del Piamonte, en el norte de Italia, en cuarentena tras detectarse varios positivos.
"Estuvo una semana en la cama. La hidratamos, porque no estaba comiendo, y luego pensamos que no se recuperaría, porque siempre tenía sueño y no reaccionaba. Y un día volvió a abrir los ojos y comenzó a hacer otra vez lo que solía hacer antes. Se despertó y volvió a comer", ha explicado su doctora, Carla Furno Marchese.
Católica practicante, Ada está convencida de que la fe la ayudó a encontrar la fuerza para combatir la enfermedad.
"Coraje, fuerza y fe", han sido sus armas.
Todos en la residencia respiraron aliviados al verla reiniciar sus rutinas: leer la prensa, mirar la televisión, hablar por teléfono y rezar.
"Ver un resultado positivo fue muy gratificante, no solo para mí, sino para todas las personas que trabajaron muy duro aquí, sin descanso", ha contado su doctora, Carla Furno Marchese.
Ada Zanussi, la centenaria con la que no ha podido ni el COVID-19, ya tiene planes para cuando termine el confinamiento.
Lo primero que quiere hacer cuando se reabran las puertas de la residencia es "dar un agradable paseo".
A la pregunta ¿qué le gustaría hacer con sus nietos y bisnietos?, responde:
"Me gustaría verlos y jugar con ellos".