Ryanair amenaza con despidos a sus tripulantes de cabina de toda Europa
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Los representantes de la tripulación de cabina acusan a la aerolínea Ryanair de chantajearles amenazándoles con el despido.
En Frankfurt, nos hemos reunido con Francesca Rinaldi, una azafata que forma parte del comité de negociación de las tripulaciones de Ryanair con base en Alemania. Sus salarios oscilan entre los 1.200 y los 2.200 euros.
Afirma que la epidemia de COVID-19 está siendo utilizada como pretexto para imponer recortes salariales bajo la amenaza de despido.
Ningún directivo de la aerolínea ha querido hablar con euronews.
Francesca pregunta por videoconferencia a sus colegas de otros países cuál es la situación allí, si Ryanair está actuando de la misma forma.
"En Francia, la compañía nos propone reducir los sueldos un diez por ciento y también el tiempo de trabajo, lo que reduciría los salarios hasta los 900 euros netos, que es el umbral de la pobreza en el país -asegura Damien Mourgues, tripulante de cabina de Ryanair y representante del sindicato SNPNC-FO-. Es una forma de chantaje ya que en la propuesta se explica claramente que, si no aceptamos, habrá un excedente de 27 tripulantes de cabina de los que tendrán que prescindir".
Francesca también habla con Gustavo Silva, un colega español. El relato de ambos es similar.
"Aquí en Alemania están amenazando implícita, pero también bastante explícitamente, con que tienen un excedente de 571 tripulantes de cabina de un total de 940 -afirma Francesca-. _Eso significa que quieren desprenderse de casi el 60 por ciento de la tripulación de cabina en Alemania. Así que quería saber cuál es la situación en España y si estáis siendo chantajeados o amenazados". _
Gustavo, representante del sindicato USO, responde:_ "Tenemos a Ryanair diciendo o firmas o 351 tripulantes de la cabina serán despedidos. Esto no es negociar, es dictaminar"_.
El cielo es´ta encapotado sobre Europa por culpa de covid-19. La industria de la aviación se dirige hacia una lucha brutal por las cuotas de mercado. Ciertas aerolíneas de bajo coste ya han empezado a presionar masivamente a sus empleados. Algunos lo llaman: chantaje de despido.