En la fábrica de Fagor, en Lyon, se fabricaban lavadoras. Pero, ahora, es un centro de creatividad. El vasto espacio industrial ha sido ocupado por coreógrafos de todo el mundo en el marco de la Bienal de la Danza de la ciudad francesa.
PUBLICIDADEn la fábrica de Fagor, en Lyon, se fabricaban lavadoras. Pero, ahora, es un centro de creatividad. El vasto espacio industrial ha sido ocupado por coreógrafos de todo el mundo en el marco de la Bienal de la Danza de la ciudad francesa.
Estos creadores dirigen proyectos artísticos para los jóvenes, y hay actuaciones y talleres gratuitos a los que la gente puede asistir.
La 'Experiencia Fagor', cuyas entradas se agotaron casi de inmediato, es una iniciativa que la directora artística de la Bienal desea que continúe.
"Para mí era una innovación, tanto artística como social. Sobre todo, porque todas las actuaciones son realizadas, también, por jóvenes lioneses, de entre 15 y 25 años. Y, cuando veo la acogida me digo que sí, que hay que continuar con ello", declara Dominique Hervieu, directora artística de la Bienal de la Danza de Lyon.
La pista de baile digital I-Dance, de Pierre Giner, demuestra que no hay excusa para no bailar; crea un avatar y el programa informático hace el resto.
La pareja de baile Rauf 'Rubberlegz' Yasit y Brigel Gjoka interpreta el estreno de 'Neighbours Part 1', en Francia, antes de la versión completa en el Sadler's Wells de Londres, el próximo año.
"Es una pieza que se refiere a una relación sobre dos personas, dos bailarines, de dos orígenes diferentes, dos culturas, que se encuentran y comparten este conocimiento, juntos, en el escenario", afirma Brigel Gjoka, bailarín y coreógrafo.
"Fue un proceso muy difícil. Tuvimos que encontrar un punto intermedio, una especie de desarrollo de nuevas herramientas que utilizamos para coreografiar. Hablábamos de ello el otro día. No es cómo nos moveríamos individualmente si hubiéramos creado una pieza en solitario. Se trata de construir un lenguaje totalmente nuevo, para comunicarnos", señala Rauf 'Rubberlegz' Yasit, bailarín y coreógrafo.
Noé Soulier recreó su pieza 'Removing' para 40 alumnos de escuelas de danza de Lyon y Angers. Su objetivo es crear un nuevo vocabulario físico explorando los movimientos cotidianos.
"Es una obra que se basa en objetivos prácticos muy simples: golpear, esquivar y lanzar. Son estos objetivos los que utilizo para hacer una coreografía, para crear un movimiento. Pero, se hace en relación con objetos imaginarios y siempre hay algo que se desvía de las líneas marcadas, siempre hay una distorsión. Por ejemplo, golpearemos con una parte frágil del cuerpo, la caja torácica o la garganta", explica Noé Soulier, director del Centro Nacional de la Danza de Angers.
En 'Entropic Now', el coreógrafo Christophe Haleb explora el lugar de los jóvenes en nuestros espacios públicos urbanos y sus deseos para el futuro, después de inspirarse en sus historias.
"Me dan ganas de cuestionar la ciudad a través de los jóvenes, de su manera de comprometerse, de involucrarse, de reunirse en los espacios públicos, en los espacios urbanos y de ponerlo en práctica, especialmente, con el deporte urbano, la danza urbana, las reuniones, la moda... En definitiva: la juventud en la ciudad", declara Christophe Haleb, coreógrafo y cineasta.
El evento que tiene lugar en Lyon es un espectáculo inmersivo y multimedia que casi desafía su descripción y que reúne vídeos, danza, música, fotografía y arte.
"Uno de los principales objetivos de la Bienal de la Danza es atraer a la próxima generación de bailarines y amantes de la danza. Eso es exactamente lo que ocurre en la Experiencia Fagor, una iniciativa repleta de talleres y espectáculos que reúne a jóvenes bailarines aficionados y coreógrafos de renombre mundial", concluye la periodista de Euronews, Andrea Bolitho.