Muchos clientes que tienen el pase sanitario tienen que comer en el interior de los restaurantes para dejar sitio a los que no lo tienen en el exterior. A veces las mesas de las terrazas quedan vacías.
PUBLICIDADEn otros tiempos los restaurantes de esta plaza de Roma estaban tomados literalmente por los turistas. Piazza Nabona es una de las innumerable bellezas de Roma pero ahora con la obligatoriedad del Pase sanitario muchas mesas de restaurantes quedan vacías. Con el añadido, para los poseedores del certificado, de tener que conformarse a menudo con un sitio en el interior, ya que la zona exterior del restaurante está destinada a los que no dispongan del pase sanitario
Concetto Saffioli, es copropietario del restaurante Cul de Sac y destaca: "Les preguntamos si lo tienen para que entiendan que si tienen el pase sanitario pueden comer dentro, pero si no, obviamente, no podemos dejarles entrar porque respetamos las normas".
La normativa exige que se muestre al hostelero el documento, ya sea en papel o digitalmente en su smarthphone, pero algunos apuestan por la confianza.
Roberto Sagnieri, es propietario del restaurante Il Pozzetto y apunta: "Personalmente, para mí, y tal vez no debería decir esto delante de una cámara, es suficiente con preguntar si (el cliente) tiene el pase. Confío en la gente, y entonces les dejo entrar."
Son pocos los clientes que no tienen el documento y según los hosteleros no suele haber problema en este sentido.
"No quiero contagiar a otra persona, aunque sea molesto llevar mascarilla", destaca uno de los clientes de la plaza_."Pero también hay que pensar en los demás, más que en uno mismo, así que no tengo ningún problema con la mascarilla, ni siquiera en los restaurantes"._
El Pase sanitario sólo será más equiparador cuando ya no se pueda disfrutar del fabuloso sol de Roma al aire libre.