Reino Unido sigue trabajando en la inyección de una tercera dosis al mayor número de ciudadsnos posibles.
PUBLICIDADEstados Unidos abre al fin sus puertas a los viajeros internacionales. Tras un año y medio con sus fronteras cerradas, el país norteamericano permite desde este lunes entrar, ya sea por tierra o por aire, a los ciudadanos de una treintena de países, entre ellos todos los del espacio Schengen, siempre y cuando hayan recibido la pauta completa de la vacuna contra el coronavirus. El viajero deberá presentar además una prueba con resultado negativo reciente.
Concluye así la larga espera desde regiones como Europa, que aguardaba visiblemente molesta una medida recíproca por parte de Washington desde que la Unión Europea abriese sus puertas a estadounidenses vacunados a comienzos de verano. Irlanda, Brasil, China, Irán, Sudáfrica India o Reino Unido son los otros países que ya gozan de la nueva medida.
En este último país, Reino Unido, trabajan mientras tanto en acelelerar lo máximo posible el despliegue de la tercera dosis, recomendando a todos aquellos que tienen derecho a la misma que la reserven con antelación. Los expertos insisten en que la dosis adicional es vital, recordando como algunas personas vulnerables o de edad avanzada vacunadas dos veces han acabado falleciendo víctimas del virus. 10 millones de personas ya han recibido el tercer pinchazo en este país.
Poca vacunación, mucha incidencia
En Rusia, mientras tanto, se sigue luchando en los hospitales de todo el país contra un número siempre creciente de pacientes con coronavirus en medio de unas tasas de vacunación ciertamente bajas. Solo el 34 por ciento de los adultos rusos están ahora mismo vacunados, frente a una media del 73 por ciento en la Unión Europea.
"Todos mis familiares están vacunados, ¡yo soy única tan estúpida!", se lamentaba María, una ciudadana de Kemerovo. "Llevo 43 días ingresada en el hospital. Tenía dudas sobre la vacunación, pero ahora no tengo ninguna".
En Rumanía vuelven a abrir los colegios tras las prolongadas vacaciones de mitad de curso, pero la apertura sólo se producirá en las escuelas en las que al menos el 60 por ciento del personal esté vacunado. En caso contrario, las clases seguirán siendo online.
Las vacaciones se habían ampliado dos semanas más para frenar una cuarta ola de coronavirus que ha golpeado con dureza un país cuyas bajas tasas de vacunación dejan tambien mucho que desear.