La planta, situada en Bubanj Potok, a unos 15 kilómetros de Belgrado, fabrica cañones y munición para prevenir tormentas de granizo y evitar así daños en los cultivos.
PUBLICIDADTragedia en una fábrica de municiones granífugas en las afueras de Belgrado, la capital de Serbia.
Al menos dos trabajadores han muerto y otros 16 han resultado heridos en una serie de explosiones, cuyo origen todavía se desconoce. Los hospitalizados sufren quemaduras graves. Cinco empleados han sido rescatados y se busca a otros, todavía desaparecidos.
Cuarenta empleados estaban en la factoría en el momento del incidente. Las explosiones, que se oyeron desde Belgrado, se produjeron en un almacén de combustible, donde había 500 cohetes granífugos con 30 kilos de explosivos.
La planta, situada en Bubanj Potok, a unos 15 kilómetros de la capital serbia, fabrica cañones y munición para prevenir tormentas de granizo y evitar así daños en los cultivos. Ha quedado totalmente destrozada. En 2008, fue escenario de otra explosión, en la que tres trabajadores resultaron heridos.