Hay mujeres, niños, ancianos, todos están realmente asustados; y jóvenes que viajan sin sus familias que no han podido abandonar Ucrania; ninguno sabe lo que les espera mañana; pero, por lo menos, saben que están a salvo.
PUBLICIDADLa corresponsal de Euronews Diana Sobaru, ha viajado en el ferry que conecta Ucrania con Rumanía, y ha comprobado que la situación de estos pasajeros es desesperada, tienen que huir de la guerra, han dejado sus casas. Hay mujeres, niños, ancianos, todos están realmente asustados, temen por sus vidas.
Esta joven nos relata su periplo.
"Tuvimos que irnos a causa de la guerra. Hace unos días estábamos sentados tranquilamente en casa y ahora intentó ir a donde está mi hermano".
Viaja sola, sin sus padres que se quedaron en Ucrania porque como explica "tenemos a nuestra abuela que está encamada y no podía marcharse".
Otra chica va a Austria donde tiene familia. Pero no sabe lo que va a hacer una vez allí.
Cuando llegan al lado rumano, los refugiados tienen que esperar un par de horas hasta que se comprueban sus documentos. Hay más de 300 personas haciendo cola, no saben cuándo acabará esto, no saben lo que les espera mañana. Pero, por lo menos, saben que están a salvo.