Poco más del 50 por ciento de los votantes franceses entre 18 y 24 aseguran que irán a votar en la primera vuelta.
PUBLICIDADLa participación se ha convertido en uno de los puntos más a tener en cuenta de las inminentes elecciones presidenciales francesas. Los sondeos muestran que el interés por estas ha ido disminuyendo más y más, especialmente entre los jóvenes. ¿Están estos votantes realmente desvinculados de la política?
En París, unos días antes de las elecciones, miles de jóvenes prefirieron marchar por la acción contra el cambio climático en lugar de asistir a los mítines de los candidatos. La política no es lo suyo.
"Si estamos aquí hoy es porque no creemos en ello, por desgracia", confesaba una joven. "En todo caso nuestras expectativas están por encima de eso". Otra manifestante aseguraba por su parte no creer "en las palabras", sino "en los hechos".** "Llevan cinco años prometiéndonos cosas y, francamente, no hemos visto nada"**. Otros asistentes a esa manifestación recordaban cómo los candidatos "no han dicho ni una palabra sobre el medio ambiente durante la campaña", haciendo a su vez hincapié en asuntos como la lucha contra las desigualdades o el apoyo a las minorías.
¿Podríamos estar ante una realidad en la que políticos y jóvenes ya no se entienden? Así lo piensa el sociólogo e historiador Marc Lazar, profesor de Historia y Sociología Política y coautor de un importante estudio sobre los jóvenes franceses de hoy en día.
"Vemos claramente que tienen una serie de preocupaciones muy importantes", resume Lazar. "En primer lugar, el medio ambiente. El 90 por ciento considera que es un asunto muy importante. También están muy movilizados en cuestiones relacionadas con el hambre en el mundo, y con la violencia contra las mujeres. Son temas que realmente les preocupan, pero no se ven realmente en la oferta política, en los partidos políticos. Y lo más llamativo es que mientras el 90 por ciento se moviliza por los temas medioambientales, sólo el 11 por ciento dice estar interesado en los Verdes. Se trata de una brecha considerable", sentencia Lazar.
¿Nuevo récord de abstención?
Según otro estudio de la Fundación Jean-Jaurès, sólo algo más de la mitad de los jóvenes entre 18 y 24 años dicen estar "seguros" de ir a votar, frente al 80 por ciento de los mayores de 70 años.
"Si efectivamente nos dirigimos hacia una abstención importante, podría haber una brecha generacional significativa entre la persona que gane las elecciones presidenciales y estos jóvenes que evolucionan en una sociedad marcada por el coronavirus", alerta Lazar, "y en la que no reconocen la forma en que esta está organizada políticamente. Y eso puede ser una señal de las fuertes tensiones que vendrán durante los próximos cinco años".
Tradicionalmente, los franceses son los que más acuden a las elecciones presidenciales. En la primera vuelta de 2017, votó el 78 por ciento de los llamados a las urnas, un ligero descenso respecto a las dos presidenciales anteriores.
El récord de abstención en la primera vuelta de unas elecciones presidenciales se remonta a 2002. Esa fue la primera vez que la extrema derecha llegó a la segunda vuelta. A pocos días de las elecciones de 2022, muchos analistas coinciden en que ese récord podría batirse este año.