En el punto de mira de la polémica, está el izquierdista Gustavo Petro por la publicación de unos vídeos que comprometen su campaña, mientras que el populista Rodolfo Hernández anuncia que existe un complot para matarle.
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Guerra sucia en la campaña presidencial colombiana. A apenas una semana de la segunda vuelta de las presidenciales en Colombia, y cuando un empate técnico se perfila en intención de voto a ambos candidatos el juego sucio sale a flote.
En el punto de mira de la polémica, está el izquierdista Gustavo Petro por la publicación de unos vídeos que comprometen su campaña. Varios medios de comunicación colombianos habrían publicado vídeos grabados hace meses de reuniones del izquierdista Pacto Histórico, y en las que se habla de maniobras para desprestigiar rivales, recibir dinero e incluso negociar con narcotraficantes presos.
Además están las amenazas de muerte. Ya en el mes de mayo, Petro denunció haber recibido amenazas de la banda criminal La Cordillera, que lidera el tráfico de estupefacientes en la región cafetera del país.
El candidato populista, Rodolfo Hernández, la sorpresa de estas elecciones al salir elegido en la primera vuelta; ha denunciado también amenazas de muerte, anunciando que existe un plan para asesinarlo "con cuchillo".
Por lo tanto, Hernández ha decidido cancelar todas sus apariciones en público y proseguir su campaña a través de redes sociales como TikTok, donde ha construido su éxito político.