Ambos gobiernos han alcanzado a un compromiso para el reconocimiento mutuo de los documentos de identidad de sus ciudadanos.
Los Gobiernos de Serbia y de Kosovo finalmente han acabado con las crecientes tensiones, con la mediación de la Unión Europea. Ambos gobiernos han alcanzado a un compromiso sobre el reconocimiento mutuo de sus documentos de identidad.
Así lo anunció en el alto representante para la política exterior y de seguridad de la UE, Josep Borrell: "Serbia ha acordado suprimir el documento de entrada y salida para los titulares de un documento de identidad de Kosovo. Y Kosovo ha acordado no introducirlos para los titulares de un documento de identidad serbio. Los serbios de Kosovo, al igual que el resto de los ciudadanos, podrán viajar libremente entre Kosovo y Serbia utilizando sus tarjetas de identificación. La Unión Europea ha recibido garantías del Primer Ministro Albin Kurti en este sentido".
En los últimos días se han vivido momentos de máxima tensión en la zona fronteriza entre ambos países ante la inminente entrada en vigor de unas medidas que Pristina calificó como de "reciprocidad", por las que dejaba de aceptar los documentos de identidad y las matrículas de coches de Serbia a partir del 1 de septiembre
En adelante los serbios de Kosovo, un cinco por ciento de la población kosovar, así como todos los demás ciudadanos, podrán viajar libremente entre Kosovo y Serbia usando sus documentos de identidad.
