Gran Bretaña hace frente a una crisis precios sin precedentes, con una inflación del 10,1% en julio, la cifra más alta desde hace 40 años
PUBLICIDADCrece la crispación entre los sindicatos británicos. Durante estos meses, que han pasado a la historia como "El verano del descontento", Reino Unido ha vivido una oleada de huelgas en los servicios públicos que reclaman subidas salariales para paliar el aumento del coste de la vida.
Ahora, las organizaciones presentarán mociones ante el Congreso de Sindicatos para incrementar el impacto de las huelgas. Gran Bretaña hace frente a una crisis precios sin precedentes, con una inflación del 10,1% en julio, la cifra más alta desde hace 40 años.
El responsable de servicios públicos del Congreso de Sindicatos (Trades Union Congress), Kevin Rowan, declaró a los medios que la organización sindical "apoyará y alentará" a los sindicatos en esta iniciativa, para que las huelgas sean "lo más eficaces" posible.
Estos retos financieros no han hecho más que aumentar debido a la subida de los costes de la energía: las autoridades dicen que los residentes en Gran Bretaña verán un aumento del 80% en sus facturas anuales de energía en octubre.
Además, según las previsiones del banco estadounidense Citi, la inflación en Reino Unido alcanzará el 18 %, nueve veces el objetivo del Banco de Inglaterra.