Lula ha resucitado cuatro años después de que se le impidiera participar en las elecciones y de pasar 580 días en prisión, por una condena de corrupción posteriormente anulada. En enero iniciará su tercer mandato.
PUBLICIDAD"¡Lula volvió!". Es el grito que más se oyó entre la marea roja que celebró la victoria del izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva en Sao Paulo. Lula regresa a la presidencia de un país totalmente polarizado, tras vencer en la segunda vuelta. Logró un 50,9 % de los votos, frente al 49,1 % de su rival, el ultraderechista Jair Bolsonaro.
"Hoy le estamos diciendo al mundo que Brasil está de regreso, que Brasil es demasiado grande para ser relegado a ese triste papel de paria del mundo", dijo Lula.
Lula ha resucitado cuatro años después de que se le impidiera participar en las elecciones y de pasar 580 días en prisión, por una condena de corrupción posteriormente anulada. En enero iniciará su tercer mandato. Para sus seguidores, un sueño hecho realidad.
"Quiero trabajo, quiero comida para todos y sé que solo Lula puede hacerlo", señalaba Ana Paula, empleada de banca.
"Para las personas trans como yo, esto significa mucho, es una victoria increíble, creo que representa a todas las personas negras, trans y LGBTQIA+", aseguraba Rafael, estudiante.
El bolsonarismo reforzado
Decepción entre los partidarios de Bolsonaro, que guarda silencio. No se sabe si impugnará o no los resultados, tal y como insinuó antes de los comicios.
Pese a la victoria de Lula, el bolsonarismo ha salido fortalecido a nivel regional. 13 de los 27 estados de Brasil estarán gobernados por políticos apoyados por Bolsonaro.