La Constitución de Moldavia obliga al país a mantenerse neutral o a utilizar sus fuerzas militares, pero ¿cuánto tiempo puede durar el statu quo mientras los combates se suceden en Ucrania?
PUBLICIDADMoldavia cerró su espacio aéreo durante dos horas esta semana. El motivo, según los medios locales, fueron "consideraciones de seguridad" en medio de la invasión rusa de la vecina Ucrania y las acusaciones de la Presidenta Maia Sandu de que el Kremlin pretendía hacerse con el poder en la República.
El artículo 11 de la Constitución de Moldavia establece: "La República proclama su neutralidad permanente, [...] no permite el despliegue de fuerzas militares de otros Estados en su territorio".
Tras la acción militar rusa en el sur de Ucrania en 2022, cerca de la frontera moldava, y ante la perspectiva de que misiles rusos violen el espacio aéreo de la República, ¿debemos esperar que cambie su postura en política exterior?
¿Seguirá finalmente Moldavia los pasos de Ucrania y reconsiderará su estatus de país neutral no alineado en favor de la integración euroatlántica y la formación de una asociación estratégica con la Unión Europea y Estados Unidos?
Moldavia y la OTAN: Breve historia
Las relaciones con la OTAN se iniciaron en 1992 con el ingreso de Moldavia en el Consejo de Cooperación del Atlántico Norte. En 1997 este foro sustituyó al Consejo de Asociación Euroatlántico, que reúne a aliados y países socios de la región euroatlántica.
La cooperación bilateral comenzó cuando Moldavia se unió al programa Asociación para la Paz en 1994. En 2006, la República acordó su primer Plan de Acción Individual de la Asociación, de dos años de duración.
En la cumbre de la Alianza celebrada en Gales en septiembre de 2014, los líderes aliados ofrecieron un mayor apoyo, asesoramiento y asistencia a Moldavia en el marco de la nueva Iniciativa de Desarrollo de la Capacidad de Defensa y Seguridad Conexa. En junio de 2015 se acordó un paquete individual de medidas.
A petición del gobierno moldavo, en diciembre de 2017 se estableció en Chisinau una Oficina de Enlace Civil de la OTAN para promover la cooperación práctica y ayudar a respaldar las reformas en el país.
Sin embargo, según Marie Dumoulin, ex diplomática de carrera y actual directora del Programa para una Europa más Amplia del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores, Moldavia tendría dificultades para unirse a la alianza debido a su postura sobre la neutralidad.
"Debido al estatus neutral consagrado en la Constitución, el país no puede ser miembro de ninguna alianza militar", afirmó.
"Por tanto, aunque Moldavia ha mantenido y mantiene relaciones con la OTAN, no es miembro de esta alianza ni de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva formada en torno a Rusia.
"En la actualidad, no desea adherirse a ninguna de estas alianzas. Y la inmensa mayoría de la población no está a favor ni de la adhesión a la OTAN ni a la OTSC".
"Al mismo tiempo, "el debate sobre el acercamiento a la OTAN y -más en general- sobre una intensificación de la cooperación en materia de seguridad con los países occidentales comenzó realmente en el contexto de la invasión de Ucrania, porque afecta directamente a la seguridad de Moldavia.
"Y Chisinau es consciente de los límites de sus propias capacidades de defensa, por lo que hay un refuerzo de la cooperación, especialmente con la Unión Europea, y un debate renovado sobre una posible profundización de la cooperación con la OTAN", señala el politólogo francés.
¿Un posible "escenario ucraniano"?
¿Qué probabilidades hay de que Moldavia reconsidere su actitud hacia la neutralidad después de que Rusia invadiera Ucrania?
"Ucrania siempre ha estado en una posición algo diferente", dijo Dumoulin. "A pesar de la cláusula de neutralidad de la Constitución, siempre ha habido una fuerte corriente de quienes querían acabar entrando en la OTAN.
"Es decir, esta cuestión se discutía mucho más en Ucrania incluso antes de la anexión de Crimea, y la anexión decantó a la opinión pública a favor de la adhesión a la alianza. La cuestión no se discutía ni se discute tanto en Moldavia, realmente no es el tema principal en el debate sobre políticas públicas."
Pero Chisinau puede verse empujada en esta dirección". En caso de una escalada de la guerra en Ucrania, añadió Dumoulin, "no podemos descartar el deseo de Chisinau de reafirmar su posición de neutralidad para mantenerse lo más alejada posible de esta guerra".
PUBLICIDAD"Por el momento, los intentos rusos de avanzar hacia Mykolaiv, Odesa y, en última instancia, hacia las fronteras de Moldavia, han sido infructuosos.
"Hasta ahora no hay información sobre una nueva ofensiva. A este respecto, las autoridades moldavas mantienen la calma. Por otro lado, en Chisinau hay preocupación por otras palancas de desestabilización que tiene Rusia".
Varios analistas no descartan que el "conflicto congelado" de Transnistria -región separatista de Moldavia apoyada por Moscú- pueda ser un detonante para que Moldavia renuncie a su neutralidad en el futuro.
Hoy, este conflicto está bajo relativo control. No se ha disparado un solo tiro desde agosto de 1992, cuando el enfrentamiento entre Chisinau y la no reconocida "República Moldava de Transnistria" entró en una fase pacífica.
"Pero hay un contingente ruso de mantenimiento de la paz en Transnistria", señala Dumoulin.
PUBLICIDADRusia se comprometió a abandonar la región a finales de la década de 1990. Pero hasta ahora no ha cumplido su obligación. Muchos establecen un paralelismo entre la creación de las llamadas Repúblicas Populares de Donetsk y Luhansk en 2014 y la actual invasión rusa a gran escala de Ucrania.
Áreas clave de cooperación en la actualidad
En la Cumbre de la OTAN de 2022 en Madrid, los aliados acordaron un paquete de apoyo adaptado para ayudar a Moldavia a implementar sus propios planes de seguridad y modernización de la defensa a largo plazo. En la actualidad Moldavia coopera con la OTAN de diversas formas.
Por ejemplo, la Alianza apoya individualmente los esfuerzos de Chisinau para reformar y modernizar el ejército a través de la Iniciativa para el Desarrollo de Capacidades de Defensa y Seguridad Relacionadas y del Programa de Mejora de la Enseñanza de la Defensa.
¿Empujará Rusia a Moldavia a los brazos de la OTAN?
Las recientes declaraciones del Presidente Sandu sobre los supuestos planes de Moscú para derrocar al gobierno proeuropeo de Chisinau se han sumado a anteriores acusaciones de que Rusia ha provocado deliberadamente una crisis energética en Moldavia.
"Las posibilidades de Rusia de desestabilizar Moldavia no son nuevas", señala Dumoulin, "están relacionadas no sólo con la situación en Ucrania, sino también con la fortísima influencia de Rusia en la República, especialmente en la esfera política".
PUBLICIDAD"También hay dependencia económica, en primer lugar energética. Moldavia ha hecho muchos esfuerzos para salir de esta dependencia, pero hasta ahora sigue siendo vulnerable."
Moscú ha sido acusado en repetidas ocasiones de una campaña deliberada de desinformación. Varios analistas han vinculado a Moscú con el partido de la oposición Shor de Moldavia, dirigido por el empresario Ilan Shor.
Según Dumoulin, esta fuerza política "puede ser manipulada por Rusia para provocar manifestaciones y movimientos antigubernamentales en Moldavia".
"La situación económica es extremadamente difícil debido al aumento de los precios de la energía, a las consecuencias de la guerra, en particular, la afluencia de un gran número de refugiados. Así, se crea un terreno fértil para los movimientos de protesta".
Perspectivas de las relaciones entre Moldavia y la OTAN
"Moldavia no ha expresado oficialmente su deseo de ingresar en la OTAN", afirmó Marie Dumoulin. "Tampoco existe consenso entre su población sobre esta cuestión, y creo que esto explica en gran medida la cautela de las autoridades moldavas.
PUBLICIDAD"No quieren iniciar un debate que podría polarizar a la opinión pública en una situación que ya es extremadamente difícil".
Sin embargo, esta situación podría afectar al acercamiento de Moldavia a la Unión Europea, que la apoya en todo lo posible, especialmente en lo que se refiere a la independencia de Chisinau respecto a Moscú.
Mucho depende, según Dumoulin, de cómo evolucione la opinión pública moldava respecto a Rusia, porque todavía hay una parte importante de la población que simpatiza con Rusia. Por otra parte, la evolución de la opinión pública hacia la Unión Europea y la OTAN también podría ser decisiva.