La fundadora de esta terapia espera que estos consigan sobrellevar mejor la situación de estrés a la que están sometidos en el frente de batalla.
En un ambiente tranquilo, lejos de las bombas y los combates y rodeados de caballos. Un grupo de soldados ucranianos buscan un momento de paz en el hipódromo de Kiev antes de tener que volver al frente. Desde el inicio de los combates, sufren de estrés permanente; y han descubierto que la equitación y el contacto con los caballos son terapéuticos.
Oleg, de nombre "Dyadya", es un soldado ucraniano, y confiesa que esta experiencia le ha gustado. "Es un ambiente completamente diferente, el contacto con los animales, hablar de ti mismo, compartir tus emociones, tus experiencias... Es genial y te recarga para el futuro", afirma Oleg.
Pero no todo es montar a caballo. La fundadora del centro, Ganna Burago, espera que estos soldados, tras hablar con ellos y conseguir que se tranquilicen y se abran a los demás; puedan sobrellevar mejor su situación.
Han pasado por mucho en el frente de batalla, por lo que corren el riesgo de sufrir un trastorno de estrés postraumático (TEPT).
"Ellos han visto muchas cosas que pueden haberles causado un TEPT. Aquí no les diagnosticamos, pero su estado psicoemocional es muy complicado", admite Burago.
Esta terapia se lleva a cabo en la organización Spirit, que también trabaja con niños y personas discapacitadas. Ahora, su objetivo es sanar algunas de las heridas que les ha dejado el conflicto a estos soldados de primera fila.