Según Ucrania, los rusos han desplegado drones para atacar instalaciones portuarias y de almacenamiento de grano en el sur de la región costera ucraniana de Odesa. Además una decena de drones no tripulados enviados por Rusia fueron derribados en Kiev, y sus restos afectaron algunos edificios.
PUBLICIDADUcrania ha sido blanco de oleadas de ataques de drones rusos. Los mandos de la defensa antiaérea afirman que 10 drones Shahed de diseño iraní disparados contra Kiev fueron derribados.
El jefe de la administración militar de la ciudad de Kiev, Sergiy Popko, reveló que grupos de drones ingresaron en Kiev simultáneamente desde varias direcciones. Sin embargo, gracias a las fuerzas y medios de defensa antiaérea, todos los objetivos aéreos fueron detectados y destruidos a tiempo, evitando un posible daño mayor.
Los restos de los vehículos no tripulados cayeron sobre tres distritos y dañaron varios edificios no residenciales, según las autoridades.
Daños en puertos estratégicos
Las tropas rusas golpearon con drones Shahed infraestructuras portuarias en el sur de Ucrania cerca de la frontera con Rumanía, durante la noche, según informó este miércoles el ejército ucraniano.
Los ataques en el crucial puerto de Odesa produjeron daños en un elevador de grano y un incendio en las instalaciones que transportan las cruciales exportaciones de grano del país.
"El enemigo atacó las instalaciones portuarias y la infraestructura industrial en el Danubio", dijo la Fiscalía en Telegram, añadiendo que "como resultado de los ataques: un elevador, cobertizos de granos, tanques de terminales de carga, almacenes y locales administrativos fueron dañados o destruidos".
La ciudad ha sido golpeada en múltiples ocasiones desde que Rusia retiró un acuerdo que permitía a Ucrania exportar grano a los mercados mundiales. Moscú se retiró con el argumento de que Occidente no le trataba con justicia en la aplicación del acuerdo.
Kiev también informó que otros puertos del Danubio habían sufrido daños. Dos pequeños puertos fronterizos con Rumanía, Reni e Izmaïl, que se han convertido en la principal vía de salida de los productos agrícolas ucranianos, desde que Rusia puso fin al acuerdo sobre cereales.
Ataque en el corazón financiero de Moscú
Los ataques se producen un día después de que un dron se estrellara contra la fachada de uno de los rascacielos que conforman el corazón financiero de Moscú, dos de cuyas torres ya sufrieron daños el pasado sábado en un ataque similar.
La defensa antiaérea también derribó dos drones en la región de Moscú, uno de ellos en la localidad de Naro-Fominsk, donde está estacionada la Segunda División de Infantería Motorizada, unidad de élite del Ejército ruso.
"Moscú se acostumbra aceleradamente a la guerra total, que pronto se trasladará de un modo definitivo al territorio de los responsables de esta guerra para cobrarles la deuda", declaró el asesor de la Presidencia ucraniana, Mijailo Podoliak, al comentar el nuevo ataque de drones contra la capital rusa.
"Todo lo que pase a partir de ahora en Rusia es un proceso histórico. Más drones de origen desconocido, más desintegración, más conflictos civiles, más guerra", alertó el asesor de la Presidencia ucraniana.
Por su parte, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, trató de quitar hierro al incidente y se limitó a constatar que "realmente la amenaza existe, es evidente y se toman medidas".