Los líderes de Serbia y Kosovo se reunirán con funcionarios europeos en Bruselas en el esfuerzo de encontrar la forma de aliviar las tensiones entre ambos países.
PUBLICIDADLos dirigentes de Serbia y Kósovo se reunirán el jueves y el viernes en Bruselas, con ocasión de la cumbre de la UE, para volver a encarrilar el proceso de estabilización.
Es la primera reunión tras el tiroteo entre paramilitares nacionalistas serbios y fuerzas de seguridad kosovares que tuvo lugar en el norte de Kósovo el 24 de septiembre. Las expectativas en Kósovo de un resultado positivo del intercambio de puntos de vista son más débiles que nunca. La jefa del grupo del Partido de Kurti en el Parlamento dice:
"Por supuesto, Kósovo estaba preparado y se mostró dispuesto al diálogo. Somos de la opinión de que el 24 de septiembre marcó un punto de inflexión crucial y negativo en el proceso de diálogo", declaróMimoza Kusari Ljilja, diputada del Partido para la Autodeterminación de Kósovo.
El pasado sábado, los principales enviados diplomáticos del Quint (UE, EE.UU., Francia, Alemania, Italia y Reino Unido) viajaron a la región y presentaron un borrador de documento que podría convertirse en la plataforma política formal para reanudar las conversaciones entre Belgrado y Pristina.
"Lo que trajeron el sábado sólo puedo adivinarlo o sólo puedo decir lo que sería lo más normal que trajeran, que es traer un borrador del Estatuto de la Asociación de Municipios Serbios que se entregaría a los partidos para su consideración", dijo Nexmedin Spahiu, profesor de ciencias políticas en la Universidad de Pristina.
Las autoridades de Pristina tuvieron que nombrar por iniciativa propia a los alcaldes del norte de Kósovo tras el boicot de la comunidad serbia local a las elecciones municipales del pasado mes de abril.
"Las declaraciones previas tanto de los partidos gobernantes como de la oposición en Kósovo indican que en realidad no se arriesgarán a sugerir la dimisión de los actuales alcaldes. Lo que significa que en los próximos seis meses, si no dimiten, se producirá una especie de crisis política prolongada", dice Igor Marković, de la ONG serbia "Aktiv Kosovska Mitrovica".
La UE, Estados Unidos y el Reino Unido quieren restablecer la estabilidad en losBalcanes Occidentales para evitar un nuevo conflicto violento tras Ucrania y Oriente Próximo.