Israel lanzó su campaña en Gaza tras la incursión de Hamás en Israel el 7 de octubre, en la que los militantes irrumpieron en el sur y mataron a unas 1.200 personas, en su mayoría civiles, y secuestraron a unas 250.
PUBLICIDADTrabajadores de protección civil han desenterrado unos 60 cadáveres de edificios derrumbados en dos distritos de la ciudad de Gaza después de que el ejército israelí se retirara tras días de combates contra Hamás.
El ejército israelí lanzó una incursión en los distritos de Tal al-Hawa y Sinaah a principios de esta semana para luchar contra lo que consideraba militantes de Hamás que se habían reagrupado allí.
Los vídeos que circularon por las redes sociales mostraban a trabajadores de la protección civil envolviendo cadáveres, entre ellos varias mujeres, en mantas en las calles sembradas de escombros de Tal al-Hawa y Sinaah.
Hasta ahora se han encontrado unos 60 cadáveres, entre ellos de familias enteras que parecían haber muerto por disparos de artillería y ataques aéreos cuando intentaban huir, declaró Mahmoud Bassal, director de protección civil en Gaza.
Algunos cadáveres habían sido devorados parcialmente por perros, otros habían ardido en el interior de viviendas y otros permanecían ilocalizables entre los escombros, dijo.
El director del cercano hospital Al-Ahli, Fadel Naem, dijo que al menos 40 cadáveres hallados en los distritos habían sido trasladados al centro, aunque no tenía una cifra exacta. El ejército israelí dijo que no podía hacer comentarios sobre el hallazgo de los cadáveres.
Asalto israelí previo aviso de evacuación
El asalto israelí a los distritos comenzó después de que el lunes emitiera una orden de evacuación de la zona. En un comunicado emitido el viernes, el ejército afirmó que sus tropas habían atacado la sede abandonada de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), donde Hamás había establecido sus operaciones.
La UNRWA abandonó el complejo en octubre, al principio de la guerra. El ejército declaró el viernes que las tropas se habían enfrentado a combatientes de Hamás y de la Yihad Islámica en el complejo y habían descubierto material para construir aviones no tripulados y depósitos de armas. Publicó fotos de parte del material descubierto, aunque las afirmaciones no pudieron ser confirmadas de forma independiente.
El viernes, las tropas se habían retirado de la mayor parte de la zona, pero francotiradores y aviones no tripulados seguían abriendo fuego, dijo Salem Elrayyes, un residente que huyó hace meses al sur pero habló con familiares que aún permanecen en el barrio.
Un día antes, trabajadores de protección civil dijeron haber encontrado decenas de cadáveres en Shijaiyah, otro distrito de la ciudad de Gaza del que las tropas israelíes se retiraron en los últimos días tras una ofensiva de dos semanas.
La mayor parte de la población de la ciudad de Gaza y las zonas circundantes del norte huyeron al principio de la guerra, pero la ONU calcula que unas 300.000 personas permanecen en el norte.
Con cada nuevo asalto, la gente suele huir a otras partes del norte, ya que hasta ahora Israel no ha permitido que los que huyen al sur regresen al norte.
El conflicto iniciado el 7 de octubre de 2022 es uno de los más mortíferos de los últimos años con más de 38.300 personas muertas en Gaza y heridas más de 88.000, según el Ministerio de Sanidad del territorio.
En su recuento, el ministerio no distingue entre combatientes y civiles. Más del 80% de los 2,3 millones de habitantes de Gaza han sido expulsados de sus hogares, y la mayoría se hacinan ahora en míseros campos de tiendas de campaña, pasando hambre de forma generalizada.