El "perro humano" que ha causado sensación en las redes. Un ciudadano japonés se gastó más de 12 000 euros en un disfraz de collie hecho a medida. Pese a las numerosas críticas, Toco asegura que esta es su afición: "Seguiré adelante. Me hace feliz y a otras personas también".
Un ciudadano japonés, que se gastó unos dos millones de yenes (unos 12 800 euros) en su disfraz de collie hecho a medida para transformarse en perro, ha compartido un vídeo en el que sale a pasear por primera vez.
El hombre, únicamente conocido como Toco, lleva un traje hiperrealista para hacer realidad su sueño de toda la vida de convertirse en un buen chico. Su canal de YouTube, "Quiero ser un animal", en el que muestra vídeos suyos con el disfraz de perro, revolcándose por el suelo, confundiendo a otros perros y siendo el mejor amigo del hombre, ha causado sensación en Internet.
Su último vídeo, en el que se le ve disfrazado de perro en público, ha tenido más de seis millones de visitas.
Toco ha afirmado que el vídeo se grabó el año pasado durante una entrevista con la cadena de televisión alemana RTL: "Afortunadamente, me han dado permiso para utilizar los vídeos, así que los pongo a disposición del público", escribió en la descripción del vídeo.
Toco contrató el año pasado a una empresa japonesa llamada Zeppet -conocida por crear esculturas y modelos para películas- para hacer el traje. La empresa tardó 40 días en crear el disfraz.
"Mis favoritos son los animales cuadrúpedos, sobre todo los bonitos. Entre ellos, pensé que un animal grande y cercano a mí estaría bien, teniendo en cuenta que sería un modelo realista, así que decidí que fuera un perro", declaró al medio japonés Mynavi.
"Recuerdo haber escrito en mi libro de graduación de primaria que quería ser un perro y salir a la calle".
Como era de esperar, desde que sus vídeos se hicieron virales en las redes sociales, Toco también ha recibido críticas. Muchos le han aconsejado buscar terapia y otros han calificado sus esfuerzos de parecerse a un perro de fetiche.
En respuesta a los comentarios, Toco ha dicho que no es un fetiche: "Me entristece que la gente pueda pensar eso. Me encantan los animales y disfruto jugando a ser un collie".
"Esta es mi afición, así que seguiré adelante. Me hace feliz y a los demás también".
Un aplauso por no ceder ante los "haters" de Internet.