La UE debe colaborar con Túnez para reducir el número de inmigrantes en situación irregular respetando su derecho a la dignidad humana, ha asegurado a Euronews el líder del Partido Popular Europeo (PPE), Manfred Weber.
PUBLICIDAD"Nuestro planteamiento es claro. Tenemos que respetar los derechos humanos. Tenemos que respetar la dignidad humana de todos los migrantes. Pero, por otro lado, tenemos que luchar contra la inmigración ilegal", ha asegurado Weber el viernes en una entrevista, días después de su visita a Túnez para tratar cuestiones de migración con el presidente Saied y los ministros de Exteriores e Interior del país.
En julio, la UE cerró un polémico acuerdo con Túnez por valor de más de 700 millones de euros para apuntalar la economía del país y frenar la entrada de migrantes en situación irregular hacia Europa.
De esa dotación, 105 millones de euros financiarán medidas de control de la migración, como operaciones contra el contrabando, gestión de fronteras y retorno de solicitantes de asilo. Túnez es punto de partida de miles de migrantes que cruzan el Mediterráneo hacia Europa, y el acuerdo podría servir de modelo a la UE para acuerdos con otros países norteafricanos.
Sin embargo, el pacto ha sido criticado por los eurodiputados por no reconocer las pruebas cada vez más numerosas del trato abusivo de las autoridades tunecinas a los inmigrantes subsaharianos, incluidas las expulsiones ilegales, el odio racial y las violaciones de los derechos humanos.
A principios de agosto, 27 migrantes aparecieron muertos en territorio libio, cerca de la frontera tunecina, días después de que el ministro del Interior, Kamel Fekih, admitiera que se estaba expulsando a pequeños grupos de migrantes a la región desértica fronteriza con Libia y Argelia.
El presidente Saied también ha apoyado anteriormente las conspiraciones de extrema derecha que afirman que los migrantes están conspirando para cambiar la composición demográfica del país.
Humanitario, pero estricto
Preguntado por el cuestionable historial de derechos humanos de las autoridades tunecinas, Weber ha afirmado que "la política migratoria europea siempre se basa en el espíritu humanitario para respetar a las personas que vienen detrás. Pero, por otro lado, tener un control estricto sobre las fronteras".
Weber, que en 2017 criticó al entonces presidente de Estados Unidos Donald Trump por construir un muro en la frontera de Estados Unidos con México, sugiere ahora que Europa necesita este tipo de mecanismos para proteger sus fronteras.
"Para mí, está claro que tenemos que proteger nuestras fronteras. Y si para ello necesitamos todas las medidas técnicas como hicimos en la frontera turco-griega, entonces es necesario", ha defendido.
"Quiero asegurarme de que nuestros ciudadanos europeos sepan que son los Estados los que controlan quién llega, y no los contrabandistas", ha añadido, "de lo contrario, no podremos asegurar el apoyo de nuestros ciudadanos a la migración legal, como los ucranianos que están llegando actualmente a Europa".
Weber también dijo que la UE debe garantizar que haya vías seguras y legales para que los que huyen de la guerra y los conflictos entren en la UE. "Debemos asegurarnos de que los que vienen son verdaderos refugiados, solicitantes de asilo, y tienen realmente un estatus de protección", ha dicho.
"No sólo por los intereses de la UE"
Sobre las condiciones de la nueva cooperación con Túnez, Weber ha apuntado que la relación debe basarse en el respeto mutuo. "No se trata sólo de nuestros intereses, de la inmigración, sino también de sus intereses, de las inversiones, de las oportunidades de trabajo para el futuro", ha asegurado, "tenemos que practicar una relación respetuosa con nuestros vecinos de allí. De lo contrario, no podremos resolver los problemas".
"Túnez tiene interés en contar con más inversiones de empresas europeas para crear buenas oportunidades de trabajo para la generación joven, de modo que ya no haya motivos para abandonar el país", ha añadido, "y nosotros tenemos interés en reducir el número de llegadas ilegales, especialmente a Italia."
Pero el Director General de Política de Vecindad de la Comisión Europea, Gert Jan Koopman, explicó el jueves ante el Parlamento Europeo que los fondos prometidos por la UE en el acuerdo de julio están actualmente bloqueados, y que aún no se ha efectuado el primer pago previsto inicialmente para julio.
Una cuestión electoral de primer orden
Tras su viaje, los grupos de izquierda del Parlamento Europeo criticaron a Weber por utilizar el tema de la inmigración para obtener beneficios políticos, algo que él niega.
"Para muchos ciudadanos europeos, la inmigración es uno de los principales problemas", ha defendido Weber, "nos enfrentamos a un referéndum en Polonia. El gobierno neerlandés cayó debido a la migración. A mucha gente le preocupa".
Weber ha afirmado que el PPE está adoptando una postura moderada y pragmática en materia de migración en comparación con sus homólogos de izquierda y extrema derecha.
"El PPE se preocupa por los intereses de nuestros ciudadanos y por eso queremos resolver los problemas", ha recordado, "no queremos usarlo como los extremistas de derechas para meter miedo a la gente, y no somos moralistas como la izquierda que sólo nos dicen lo que debemos hacer desde un punto de vista moral".
PUBLICIDAD"Prácticamente estamos resolviendo los problemas con la idea de un enfoque humanitario, pero con un estricto control de las fronteras", ha proseguido.
Es probable que la migración ocupe el primer lugar en la mente de muchos votantes en las elecciones europeas del próximo mes de junio.