El canciller alemán Olaf Scholz ha prometido que endurecerá las leyes sobre armas blancas. También ha señalado que endurecerá las deportaciones de solicitantes de asilo cuyas solicitudes hayan sido rechazadas.
PUBLICIDADScholz, que se unió a las autoridades regionales en la colocación de una flor blanca en un monumento improvisado en la ciudad occidental de Solingen, dijo que estaba "furioso y enojado" por el ataque, en el que el presunto extremista islámico de Siria habría matado a tres personas y herido a otras ocho.
El sospechoso se entregó a la Policía el sábado por la noche, un día después del ataque en un festival que conmemoraba el 650 aniversario de la ciudad. Los fiscales federales dijeron el domingo que compartía la ideología radical del grupo Estado Islámico.
El sospechoso se habría unido al grupo en un momento que sigue sin estar claro, y habría actuado en base a esas creencias cuando apuñaló a sus víctimas repetidamente por la espalda en el cuello y la parte superior del cuerpo, según los agentes.
La solicitud de asilo del joven de 26 años había sido rechazada y se suponía que iba a ser deportado el año pasado a Bulgaria, donde entró por primera vez en la Unión Europea.
El atentado ha reavivado las críticas en materia de inmirgación y deportación
Su deportación de Alemania nunca se produjo porque desapareció durante un tiempo, según informan los medios de comunicación alemanes. Esto ha reavivado las críticas al Gobierno en materia de inmigración y deportación, un tema en el que ha sido vulnerable durante mucho tiempo.
El Gobierno ha tomado medidas para suavizar la situación, por ejemplo, con la aprobación en enero de una ley para facilitar las expulsiones de solicitantes de asilo rechazados. También ha puesto en marcha legislación para facilitar la deportación de extranjeros que aprueben públicamente actos terroristas.
"Debemos hacer todo lo posible para que estas cosas no ocurran nunca en nuestro país", declaró Scholz en relación con el atentado. Scholz señaló que, entre otras cosas, habría que endurecer la legislación sobre armas blancas.
Scholz también dijo que ya se había producido un aumento del 30% en las deportaciones este año, pero "estudiaremos muy de cerca cómo podemos contribuir a aumentar aún más estas cifras".