BRASILIA, 30 ene - La deuda pública de Brasil como proporción del Producto Interno Bruto cerró 2022 en su nivel más bajo en más de cinco años, mostraron el lunes datos del banco central, ayudada por el crecimiento económico nominal y las amortizaciones netas de deuda pública.
La deuda bruta del país cayó al 73,5% del PIB en diciembre desde el 74,6% de noviembre, acumulando una contracción de 4,8 puntos en el año, hasta su ratio más bajo desde julio de 2017, cuando alcanzó el 73,2%.
La reducción estuvo liderada principalmente por un aumento nominal del PIB, que también se ve afectado por la inflación.
Los economistas encuestados semanalmente por el banco central estiman ahora un aumento del 3% en el PIB de 2022, después de comenzar el año pasado pronosticando un leve crecimiento del 0,3%.
La mayor economía de América Latina ha mostrado más vigor del previsto inicialmente gracias a la sólida actividad de los servicios, la mejora del mercado laboral y el estímulo fiscal del Gobierno antes de las elecciones presidenciales de octubre.
Pero la impresionante reducción de la deuda bruta también se vio favorecida por las amortizaciones de deuda pública neta, ya que el Tesoro optó por reducir las emisiones de bonos, mientras que la tasa de interés de referencia de Brasil se elevó agresivamente para luchar contra la inflación.
El pago anticipado de las deudas del banco estatal de desarrollo BNDES con el Tesoro también contribuyó a reducir la necesidad de emitir bonos, así como el propio resultado primario del Gobierno.
El sector público del país registró un déficit primario de 11.800 millones de reales (2.300 millones de dólares) en diciembre, pero un superávit de 126.000 millones de reales para 2022, su segundo resultado anual positivo consecutivo y el mejor resultado para un año desde 2011.
El sólido resultado anual se produjo solo dos años después del déficit récord de 2020, de 703.000 millones de reales, impulsado por el gasto de la pandemia.
El resultado de 2022 se debió principalmente al superávit primario de 64.900 millones de reales de los estados y municipios. Por su parte, el Gobierno central registró un superávit de 54.900 millones de reales, y las empresas estatales un superávit de 6.100 millones de reales.
(1 dólar = 5,1078 reales)