Ocho excursionistas han muerto como consecuencia de la crecida de un río por las fuertes lluvias en la región de Calabria, al sur de Italia. 23 personas han sido rescatadas, entre ellas varios niños. La tragedia ocurrió en el Parque Nacional del Pollino, cuando un grupo de jóvenes que estaba visitando las gargantas del río Raganello se vieron sorprendidos por la crecida. Las gargantas del río Raganello forman un área natural protegida que se extiende a lo largo de 1.600 hectáreas y un cañón de 13 kilómetros de longitud.
Esta zona recibe muchas visitas en verano, "pero las crecidas del torrente se dan solo en invierno y nunca había pasado en esta época del año", ha explicado el responsable del equipo de rescate alpino de Calabria, Luca Franzese.
