Un inmueble de 20 pisos en la ciudad de Duisburgo, en el oeste de Alemania, fue derribado como parte de una demolición controlada. Las autoridades demolieron el edificio de apartamentos, construido en los años setenta, conocido localmente como el "Gigante Blanco", para dejar el espacio libre para nuevas construcciones.
Aproximadamente 2 500 personas fueron evacuadas el domingo por la mañana para llevar a cabo la operación, en la que se emplearon, aproximadamente, 290 kilogramos de explosivos.
Duisburgo es una ciudad situada en la región industrial alemana del Ruhr. Otros rascacielos, cercanos al que fue derribado, también están incluidos en una lista para su próxima demolición como parte de los planes de rejuvenecimiento del distrito.
