Un matrimonio y su hijo de un año y medio fallecieron por una avalancha de nieve en una estación de esquí cercana a las afueras de la ciudad de Norilsk, en el norte de Rusia.
La avalancha de nieve se produjo en la noche del viernes al sábado y dejó además a un adolescente herido, probablemente de la misma familia, que fue trasladado posteriormente al hospital.
Cuatro edificios de una estación de esquí al noreste de Norilsk, ubicada a 2.900 kilómetros de Moscú, donde las condiciones climáticas son extremas, fueron sepultados por la nieve cerca de la medianoche. Las temperaturas, según medios locales, cayeron por debajo de los 25ºC en la zona montañosa.
Otra familia de cuatro personas fue rescatada después de la avalancha y, según los informes, otras dos personas se dirigieron por sus propios medios a un lugar seguro. Imágenes de video mostraban a los rescatistas cavando en la nieve, que tiene hasta tres metros de altura, mientras una tormenta de nieve dificulta las tareas de rescate.
Las tareas de búsqueda y rescate de otras posibles víctimas finalizaron pasado el mediodía mientras se abrió una investigación por presunto "incumplimiento de las reglas de seguridad" del lugar, que provocaron varios "homicidios involuntarios".
