Decenas de clientes destrozaron el jueves las ventanas de los bancos y quemaron neumáticos en la capital dsel Línbano, Beirut, para exigir la devolución de su dinero, mientras la moneda libanesa se desplomaba frente al dólar.
En el barrio de Badaro, en Beirut, unas cincuenta personas destrozaron las fachadas de al menos cuatro bancos y quemaron neumáticos delante de ellos, durante una manifestación iniciada por una asociación de clientes.Los manifestantes se reunieron después frente a la casa de un banquero en los suburbios de Beirut, según los medios de comunicación locales.
Desde el inicio de la crisis económica sin precedentes en 2019, la libra libanesa ha perdido más del 95% de su valor frente al billete verde.
Los ahorradores ya no tienen acceso a sus ahorros bloqueados en los bancos, que han restringido las retiradas y las transferencias de dinero.
Líbano atraviesa una de las peores crisis económicas del mundo desde 1850, según el Banco Mundial, una situación agravada por la crisis política con un Gobierno interino incapaz de adoptar las reformas necesarias para obtener ayuda de la comunidad internacional.
