En Vitoria-Gasteiz la llaman "la gran granizada". Este jueves, piedras de hielo del tamaño de pelotas de golf cayeron sobre la capital vasca causando daños materiales en miles de vehículos, mobiliario urbano y árboles.
Los transeúntes, sorprendidos por la granizada, se cobijaron donde pudieron. Algunas calles quedaron anegadas.
También fue impresionante la tormenta que se abatió sobre Cuarte de Huerva, un municipio de Zaragoza, donde las calles se convirtieron en auténticos ríos y los bomberos tuvieron que multiplicar las intervenciones. Los daños también son cuantiosos.
