Su iniciativa, centrada en el cultivo de hortalizas tradicionales, les ayuda a reforzar la identidad cultural y, al mismo tiempo, a hacer frente a la inseguridad alimentaria y a los retos ambientales en una de las zonas más densamente pobladas de África.
Fundada en 2019, la Mazingira Women Initiative reúne a unas 50 integrantes que cultivan especies autóctonas como el amaranto, la okra y la malva de yute —alimentos básicos de la cocina nubia—. El grupo también convierte los residuos orgánicos en abono y promueve métodos agrícolas capaces de adaptarse al cambio climático, adecuados a la escasez de tierra y recursos del asentamiento. Para muchas mujeres, el proyecto se ha convertido en un salvavidas económico y en una vía para reconectar con tradiciones ancestrales transmitidas de generación en generación.
Pese a ello, la agricultura en asentamientos informales sigue siendo precaria. Con un acceso limitado a tierras seguras, las mujeres a menudo se enfrentan al riesgo de perder sus espacios de cultivo por proyectos urbanísticos. Aun así, al combinar innovación y legado, la Mazingira Women Initiative demuestra que la agricultura urbana puede ayudar a preservar la cultura, empoderar a las comunidades y reforzar la resiliencia frente al cambio climático.
