Varios cientos de personas participaron en una manifestación en las calles de Susa, la ciudad meridional que dos días después de la masacre en la que
PUBLICIDADVarios cientos de personas participaron en una manifestación en las calles de Susa, la ciudad meridional que dos días después de la masacre en la que murieron 38 personas, la mayoría extranjeros, sigue conmocionada.
Aseguraron en pancartas escritas en varios idiomas que su labor como ciudadanos es rechazar de forma categórica actos violentos, en los que se ataca tanto a los turistas como a los tunecinos.
También en la emblemática Avenida Bourguiba, escenario de las manifestaciones que terminaron con el régimen del presidente Zinedine Ben Ali, un centenar de personas acudieron al llamamiento del partido de la oposición Frente Popular, donde su líder Hamma Hammami pidió que la lucha contra el terrorismo no limite la libertad y los derechos de la población.
El Gobierno se reúne este domingo para decidir medidas complementarias de lo que han llamado un “plan excepcional” con el que intentarán proteger mil kilómetros de costa.