Dar la victoria a los conservadores para frenar al Frente Nacional de Marine Le Pen en Francia. Así lo plantea el Partido Socialista tras la primera
Dar la victoria a los conservadores para frenar al Frente Nacional de Marine Le Pen en Francia. Así lo plantea el Partido Socialista tras la primera ronda de las elecciones regionales. El primer ministro, Manuel Valls, ha pedido a sus candidatos que no tengan opciones de ganar en la segunda vuelta que se retiren y que sus votantes apoyen al partido de Los Republicanos de Nicolas Sarkozy para que estos derroten a los ultraderechistas.
“Asumo mis responsabilidades, esa es la gran diferencia entre nosotros y Nicolas Sarkozy. Cuando se tienen responsabilidades publicas, hay que asumirlas y elegir. Cuando uno ama a su país, no duda, va hasta el final y pide el voto para Los Republicanos”, se justificaba Valls.
Se trata de las regiones de Nord-Pas-de-Calais Picardie; Provenza Alpes Costa Azul y Alsacia Lorena Champaña Árdenas, aunque en esta última su candidato se niega.
Los Republicanos no comparten la estrategia y no devolverán el favor en Languedoc-Roussillon Midi-Pyrénées. Así lo dejaba claro Sarkozy: “Los socialistas han tomado una decisión que respeto. Es su elección y la han tomado sin que nosotros no les hayamos pedido nada. Nosotros hemos optado por mantener nuestras listas porque estoy convencido de que somos los únicos que podemos unir a la gente contra el Frente Nacional”.
La decisión socialista puede dejar en bandeja a Los Republicanos.
Muchos analistas adujeron que la preocupación por la seguridad tras los atentados islamistas fue clave en la victoria en la primera ronda al Frente Nacional, que superó el 28% de los votos frente al 27% de Los Republicanos y el 23 de los socialistas. Sin embargo, encuestas posteriores reflejan que la prioridad sería la economía lo que sería un golpe a la gestión de François Hollande.