Este domingo su famosa plaza de San Marco, no sólo apereció abarrotada de público y disfraces de época. Además de risas y bailes la seguridad también
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Este domingo su famosa plaza de San Marco, no sólo apereció abarrotada de público y disfraces de época. Además de risas y bailes la seguridad también centró la atención de los organizadores. El objetivo: evitar posbiles atentados terroristas y altercados violentos.
“Creo que es normal después de los atentados terroristas del grupo Estado Islámico(EI),asegura una turista suiza.
Las autoridades han aumentado la vigilancia en toda la ciudad, pero se negaron a la propuesta de prohibir que los asistentes usaran máscaras, porque “sin máscaras no hay carnaval”- dijeron-.
“Nos amenazan con terrorismo, pero nosotros lo combatimos, viniendo aquí. Con nuestra presencia les demostramos que no tenemos miedo a nada”, añade otro de los participantes.
La policía procedió también al chequeo de bolsos y la retirada de objetos potencialmente peligrosos como sprays o varillas de hierro.
EL fuerte operativo policial se mantendrá durante los diez días que dura el carnaval, hasta el nueve de febrero.