Sin salida; así se encuentran los cerca de 42.000 refugiados e inmigrantes atrapados en Grecia. Con las fronteras cerradas y un plan de expulsiones
PUBLICIDADSin salida; así se encuentran los cerca de 42.000 refugiados e inmigrantes atrapados en Grecia.
Con las fronteras cerradas y un plan de expulsiones colectivas gestándose entre Bruselas y Ankara, los que han logrado llegar hasta la localidad de Idomeni, en la frontera con Macedonia, se niegan a abandonar este campamento que las torrenciales lluvias han convertido en un lodazal.
“Esta decisión quizás sea justa para la Unión Europea pero no lo es para nosotros, para los que hemos logrado llegar hasta aquí, hasta este punto. Y tras lograrlo nos cierran todas las fronteras en la cara. No es justo”, denuncia este ciudadano sirio.
Atenas ha anunciado que habilitará ocho nuevos centros de acogida temporal. Pero quienes han logrado la gesta de llegar hasta Idomeni se resisten a abandonar la esperanza de que en algún momento se abra la frontera macedonia.
Las autoridades griegas han registrado un repunte del número de llegadas de personas procedentes de Turquía.
En las últimas 24 horas, 2.300 personas han desembarcado en las costas griegas. Otros no han tenido tanta suerte, como los cinco refugiados que han perdido la vida al hundirse la lancha en la que viajaban. Entre las víctimas, un bebé de tres meses.