Si en algún país la llegada al poder de Donald Trump se espera con recelo y temor, ese país es México.
PUBLICIDADSi en algún país la llegada al poder de Donald Trump se espera con recelo y temor, ese país es México. Muchos mexicanos temen las políticas que llevará a cabo Trump como presidente de Estados Unidos. Pero ¿este miedo es fundado?
Habrá que esperar para ver cuáles serán sus medidas, pero las promesas electorales realizadas durante su campaña fueron muy desalentadoras.
Isidro Morales, director de políticas del Instituto de Tecnología y educación superior de Monterrey: “Somos tan vulnerables a lo que pasa en Estados Unidos que basta con que diga Trump que va a elevar los impuestos a México para que haya una salida de capitales. Estamos en una gran vulnerabilidad”.
Entre otras cosas, Donald Trump ha prometido revisar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte que entró en vigor en 1994 y que fue firmado por México, Estados Unidos y Canadá.
Este acuerdo permite importar mercancías libres de aranceles a Estados Unidos, especialmente coches.Trump ha ejercido mucha presión sobre los sectores del automóvil y la producción: ha pedido gravar con un 35% los coches fabricados por compañías estadonidense y globales en México para forzar a los fabricantes a crear empleo en Estados Unidos. Esta medida devastaría la industria del automóvil de México, la mayor de América Latina.
María Dolores Vargas, turista mexicana: “Yo creo que lo que dice es una tontería porque está perjudicando a su país y a nosotros también porque venimos aquí a comprar. Eso es mucho mejor para la economía”“.
Alydia Cazacia, turista mexicana: “No sé la verdad. No sé, estamos a ver qué pasa”
Pero el comercio y la producción no son los únicos temas de la agenda de Trump en México. Desde el comienzo de su campaña ha prometido construir un muro en la frontera que comparten los dos países y que obligaría a pagar a México. También ha anunciado la deportación de millones de inmigrantes mexicanos indocumentados.
Isidro Morales, director de políticas del Instituto de Tecnología y educación superior de Monterrey: “Va a haber deportaciones pero probablemente en el mismo nivel que hubo con Obama. Quizás se aumente un poco más pero no creo que vaya a haber la deportación de 3 millones que ha dicho porque no hay capacidad ni siquiera de la policía para deportar a tantos”
La llegada de Trump a la Casa Blanca coincide con un estancamiento de la economía en México y un aumento de la inflación. El Gobierno mexicano quiere abrir las negociaciones con su vecino cuanto antes. Según los analistas, la mejor opción para mantener una buena vecindad con el nuevo presidente estadounidense es apostar por la diplomacia.