Los ingenieros se enfrentan a un rompecabezas técnico en la presa más alta de Estados Unidos.
Los ingenieros se enfrentan a un rompecabezas técnico en la presa más alta de Estados Unidos.
Por ahora los equipos de emergencia han conseguido contener una tragedia de enormes dimensiones, pero el riesgo de una inundación a gran escala si el embalse de Oroville cede, sigue presente. Las autoridades han evacuado a 200.000 personas hasta nueva orden.
Habla el jefe de policía del condado de Butte, Kory Honea:
“ Devolver a esa gente a sus hogares es importante para mí. Por supuesto que deseo que eso ocurra lo antes posible, pero tenemos que asegurarnos de que no hay ningún riesgo. Si vuelve la lluvia y cae más agua en el lago, si no tengo la certeza absoluta de que esas personas van a estar bien, entonces no he hecho mi trabajo como debería”
Las alarmas saltaron el domingo cuando el agua acumulada en el lago por las intensas lluvias recientes comenzó a rebasar uno de los aliviaderos. El torrente que supera en volumen a las Cataratas del Niagara está erosionando el terreno adyacente al muro de contención, que amenaza con fisurarse y liberar un muro de agua de 9 metros.