Mujeres y niñas rohinyás han sido víctimas de violaciones masivas por parte del Ejército birmano. Lo afirma la ONG Human Rights Watch tras realizar una investigación sobre la crisis que ha llevado a huir de Birmania a más de seiscientos mil miembros de esta minoría musulmana en los últimos tres meses.
- “Desde el 25 de agosto, los militares birmanos han llevado a cabo una campaña de limpieza étnica contra los rohinyás en el norteño estado de Rakhine”, explica Skye Wheeler, inspectora de la organización… El resultado ha sido una crisis humanitaria de asombrosa velocidad y gravedad”, sentencia Wheeler.
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amnesty live from the UN.Findings of mass rape and ethnic cleansing in Burma. https://t.co/6vVNXdtMul#Rohingyapic.twitter.com/U9JYi93vUq— Human Rights Watch (@hrw) 16 novembre 2017
Human Rights Watch interrogó a medio centenar de mujeres de distintas localidades del estado de Rakhine. Veintinueve de ellas habían sufrido violaciones. Sus testimonios son sobrecogedores:
- “Una de mis vecinas era una chica muy hermosa llamada Din-newaz. Era muy guapa. Tres soldados la vieron esconderse y la sacaron fuera. Uno de ellos la recostó. Le subieron la ropa y dos de ellos la violaron. Cuando terminaron, el primero de ellos le disparó y la mató. Lo ví con mis propios ojos”, narraba una refugiada.
Aunque las ONG que asisten a los refugiados en Bangladés han recibido cientos de denuncias violaciones masivas y la ONU habla abiertamente de campaña de limpieza étnica, las autoridades birmanas lo niegan con vehemencia.