El mercadillo navideño de Potsdam, en Alemania, reabrió sus puertas este sábado un día después de ser evacuado por la presencia de un paquete sospechoso.
Los ciudadanos no quieren que el clima de terror creado por los terroristas condicione su vida diaria:
"Si la gente muestra que tiene miedo habrán conseguido su objetivo y no queremos eso. Así que venimos aquí y demostramos nuestra fuerza", decía una mujer.
"Es una sensación rara que ocurra en tu propia ciudad, pero aún no sabemos qué era y venimos aquí de todas formas", explicaba un joven.
La policía alemana ha descartado que el mercadillo fuera objetivo de un atentado e investiga para encontrar al remitente del paquete.
"Todavía no sabemos quién era el destinatario de este dispositivo, pero es improbable que fuera el mercado navideño de Potsdam", afirma Torsten Herbst, policía de Brandeburgo.
Los mercadillos de Navidad de toda Alemania abrieron esta semana sus puertas bajo fuertes medidas de seguridad tras el atentado del año pasado en Berlín, en el que murieron doce personas arrolladas por un camión.