El país transalpino vota este domingo con mucha incertidumbre y pocas esperanzas de encontrar un Gobierno mayoritario y estable. Se espera que la abstención sea muy alta.
PUBLICIDADTodo listo para la celebración de las elecciones generales en Italia. Tras cinco años de inestabilidad política, marcados por la sucesión continuada de primeros ministros, el país transalpino vota este domingo con mucha incertidumbre y pocas esperanzas. Tanto la opinión de la gente como los datos hablan de un resultado que hará casi inviable la formación de un nuevo Gobierno.
"Aún no he decidido a quién votar, tengo muchas dudas", nos dice una ciudadana romana. "Iré y votaré, pero realmente no sé cuál es el voto útil para Italia".
"Esperemos que estas elecciones traigan un poco de orden al país", señala otro ciudadano. "Esa es nuestra esperanza. Creo que mucha gente, muchos italianos, tienen esa idea".
La campaña electoral ha girado fundamentalmente en torno a la inmigración y al papel de Italia en Europa. Una de las formaciones que más clara ha dejado su postura en ambos asuntos es Liga Norte, euroescéptica y ultraderechista, que concurre junto con la Forza Italia de Silvio Berlusconi.
Esta coalición podría estar cerca de alcanzar la mayoría necesaria requerida por un complicado sistema electoral, si bien el partido que más votos sumará será probablemente el Movimento 5 estrellas, formación antisistema que ha sabido llevar a su terreno el descontento general de millones de italianos. Sus opciones de gobernar son pocas ya que se niegan a aliarse con otras fuerzas.
El Partido Democrático tiene complicado volver a gobernar, aunque tal vez podría formar parte de una gran coalición neutral en busca de estabilidad. Las opciones son muchas y ninguna está clara.
46 millones de italianos están llamados a tratar de solucionar el eterno caos de su gobierno. La abstención, sobre todo entre los jóvenes, será muy alta.