"Es una decisión que anticipo a consecuencia de lo de hoy", ha anunciado Cifuentes en una rueda de prensa extraordinaria en la que ha asegurado que la determinación de dimitir ya la había tomado hace unos días.
PUBLICIDAD"A los que queréis que me vaya, no me voy, me quedo", con estas palabras la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, respondía cuando empezó a verse acorralada en el caso de su supuesto máster falso. Cuando la presión aumentó, dijo que no se iría si no se lo pedía el presidente Mariano Rajoy. Un vídeo publicado hoy en exclusiva por el periódico 'Ok diario' ha sentenciado su salida.
"Es una decisión que anticipo a consecuencia de lo de hoy", ha anunciado Cifuentes en una rueda de prensa extraordinaria en la que ha asegurado que la determinación de dimitir ya la había tomado hace unos días, pero que tenía pensado anunciarlo tras las festividades del 2 de mayo. "He aguantado más de 35 días de una exposición permanente, un linchamiento por tierra, mar y aire", ha justificado.
El vídeo que ha precipitado los acontecimiento es la grabación de una cámara de seguridad de un hipermercado Eroski del Puente de Vallecas, en Madrid, en el que se puede ver como dos guardias de seguridad custodian a una mujer a la parte trasera del establecimiento y le revisan el bolso. Las imágenes datan del 4 de mayo de 2011, cuando Cifuentes ostentaba el cargo de vicepresidenta primera de la Asamblea.
'Ok Diario' asegura que la mujer es Cifuentes, que al ser descubierta intentando hurtar dos botes de crema anti-edad de la marca Olay, valorados en poco más de 40 euros, fue retenida durante 45 minutos, hasta la llegada de dos agentes de la Policía Nacional ante la supuesta negativa de la presidenta a pagar los productos.
"Todos ustedes saben que he sido espiada, investigada durante años", lamentaba Cifuentes, en la rueda de prensa en la que ha anunciado su dimisión. La presidenta de la Comunidad de Madrid no ha negado la veracidad de la grabación de seguridad, pero sí ha criticado el relato que se ha compartido en los medios de comunicación.
"Obedece exclusivamente a un error involuntario", ha asegurado. Según Cifuentes, no se dio cuenta en un primer momento de que se estaba llevando los productos de cosmética, pero que una vez consciente de ello, abonó el importe.
La presidenta dice que sabía de la existencia de la grabación y que ya había sido extorsionada con el mismo vídeo hace años. "Se ha utilizado para querer rematar alguna clase de campaña", ha añadido. "En esta cuestión se han traspasado todas las lineas rojas".
"He cometido delitos en mi vida, me he saltado semáforos en rojo", ha añadido, tras denunciar el juicio público al que ha sido expuesta en los últimos días. "Me voy con la cabeza muy alta, pero con un punto amargo desde el punto de vista personal", ha concluido.
Fuentes del Partido Popular, consultadas por Libertad Digital, señalaban el hartazgo de la formación con las crecientes polémicas que enturbian la reputación de la presidenta de Madrid y la urgen a dimitir. "No podemos llegar al 2 de Mayo, esto es insoportable, todos los días algo nuevo", indican.
Sin embargo, algunos políticos de otras formaciones apuntaban a que la publicación de un vídeo siete años después de que ocurriera el presunto hurto, se trataría de una estrategia orquestada desde el gobierno para forzar la salida.
La regulación española sobre vídeos de vigilancia ha alimentado también la teoría de un golpe orquestado desde Génova. La ley 4/1997, en su artículo 8, regula que las grabaciones de las cámaras de seguridad tienen que ser destruidas en el plazo máximo de un mes desde su captación. Por lo que un vídeo de 2011 no debería existir en 2018.