Harvey Weinstein se entregará este viernes a la justicia

El movimiento MeToo respira aliviado. Siete meses después de que estallara el escándalo, Harvey Weinstein se va a entregar a la justicia en Nueva York. Se espera que el tribunal le impute los delitos de violación contra una mujer, cuya identidad no se ha sido desvelada, y por obligar en 2004 a la actriz Lucia Evans a hacerle una felación.
Ni la policía ni el fiscal de Manhattan han confirmado la noticia, pero The New York Times asegura que el productor ha negociado un acuerdo por el que quedará en libertad a cambio de una fianza de un millón de dólares. También tendrá que llevar una pulsera electrónica y entregar el pasaporte.
El productor, que gozaba de un enorme poder en la industria del cine, tiene como abogado al famoso Ben Brafman, que consiguió que se abandonaran las acusaciones contra el expatrón del FMI Dominique Strauss-Kahn por intento de violación contra una empleada de hotel en 2011.
Más de cien mujeres han acusado a Weinstein de acoso, abusos o violaciones, entre ellas, actrices de la talla de Angelina Jolie, Gwyneth Paltrow, Rose McGowan o Asia Argento. Numerosas denuncias han sido presentadas en Nueva York y Los Ángeles, pero hasta ahora ninguna había salido adelante, lo que empezaba a desesperar a las víctimas.