En Moscú, algunos locales se están quedando secos
¿Serán capaces los bares y restaurantes rusos de satisfacer la enorme demanda de cerveza hasta el final del Mundial? Al ritmo actual, parece difícil...
"Más cervezas después del partido", dice un aficionado inglés, con dos vasos de la espumosa bebida en las manos.
En Moscú, algunos locales se están quedando secos. Miles de aficionados, calor más fútbol igual a reservas agotadas. Las entregas están tardando más de lo habitual, al menos 24 horas, ya que los proveedores también se están quedando sin existencias.
Más previsores han sido en Ekaterimburgo. Las cervezas especiales producidas para cada uno de los cuatro partidos del Mundial que acoge la ciudad, fabricadas en una pequeña fábrica de los Urales especializada en hacer bebidas con música, están teniendo un gran éxito.
"No esperábamos tener una cerveza tan buena en Rusia. No lo esperábamos. Pero, sabe qué, estoy muy contenta", señala Hermis Moutardier, aficionada de Perú, residente en Miami (Estados Unidos).
Con cerveza o sin ella, la fiesta continúa para los miles de aficionados que han viajado a Rusia para apoyar a sus selecciones.
