Su pasión por el plumaje y la artesanía le ha llevado a trabajar para la alta costura y hoy en día Éric Charles-Donatien es conocido como el último gran maestro en este arte en París. Visitamos al diseñador en su estudio para aprender más sobre este oficio.
PUBLICIDADEl arte de la artesanía realizada a base de plumas está presente en París desde hace siglos. En capital de la moda se encuentra uno de los pocos especialistas de este odicio, que quedan en la ciudad: Éric Charles-Donatien
Él no entiende este oficio sin un compromiso con la belleza, con la verdad. "Trabajas con las manos, tienes tu cabeza para ayudarlas, tu corazón, para que lo que realices refleje una sensibilidad y emocione a la gente. Yo no creo que puedas crear una obra valiosa, un objeto artístico sin que lleve una emoción implícita", comenta.
Esto es lo que mueve a este maestro artesano, uno de los más codiciados en el mundo de la moda actual. A Éric Charles-Donatien le gusta estar entre bastidores. Trabaja en su estudio ubicado en el onceavo distrito de París. Pero empezó en otro taller en la legendaria Maison Lemarié, especializada en plumería
Después creó su propia empresa, pero sigue trabajando mano a mano con algunas de las mayores marcas de lujo. Entre su producción figuran obras para la decoración de interiores, piezas de moda y joyas. Éric Charles-Donatien explica que "ell concepto reside en mezclar las plumas, siempre, con algo más. Yo también soy mestizo: indo-caribeño y creo que esa mezcla es clave en este trabajo".
Entre otras cosas, ha creado un centro de mesa, utilizando diferentes materiales para mostrar la diversidad de este arte. "Esta pieza forma parte de la muestra que figurará en la exposición Homo Faber. Es un arco. Y la idea es que lleve el espíritu de la armadura, para recordar que las plumas son como escamas, funcionan como algo hermoso pero que también protege y da la bienvenida", explica.
Posee algunas plumas de gran belleza, que le fueron donadas, principalmente por zoológicos. Recalca que para sus obras sólo utiliza plumas perdidas de forma natural. El trabajo respeta la actual convención de Washington y no utiliza plumas de aves protegidas o en peligro de extinción.
El artista organiza a menudo talleres para transmitir este arte a jóvenes artesanos, interesados por esta técnica. Aunque dice que "es complicado hacerles entender que de vez en cuando tienen que olvidarse de ellos mismos. Se trata de compartir, de asegurarse de que estás haciendo algo por esas plumas por esa obra".
A su juicio, la artesanía en Europa y a nivel mundial se enfrenta a algunos retos de peso: "Creo que tenemos que revalorizar ese trabajo manual. Hemos entendido que para ello hay que mostrarlo. Y ahora tenemos que entender que si no lo valoramos económicamente hablando, morirá", sentencia.
Éric-Charles Donatien es uno de los artistasinvitados a participar en la exposición Homo Faber de Venecia, especializada en la alta artesanía europea.