Distancia y frialdad en la última reunión de la visita de Recep Tayyip Erdogan a Alemania. El encuentro entre el presidente turco y a canciller alemana, Angela Merkel, ha vuelto a poner de manifiesto la brecha entre los dos mandatarios
Distancia y frialdad en la última reunión de la visita de Recep Tayyip Erdogan a Alemania. El encuentro entre el presidente turco y a canciller alemana, Angela Merkel, ha vuelto a poner de manifiesto la brecha entre los dos mandatarios. Merkel ha recordado este sábado las "profundas diferencias" que persisten en la actualidad y que "tienen que ver con el Estado de derecho y la libertad de prensa". Erdogan, por su parte, ha pedido a Berlín que reconozca como organización terrorista al movimiento del predicador Fethullah Gülen, al que Ankara atribuye la organización del golpe de Estado de 2016.
Erdogan inaugura este sábado la mezquita construida en Colonia por la asociación Ditib, apoyada por el gobierno turco. Pese a que las autoridades de la ciudad habían desautorizado una multitudinaria concentración a favor del mandatario, cientos de personas se han acercado a las inmediaciones del edificio para rendirle homenaje. Sin embargo, no todo fueron pancartas de bienvenida: Bajo el eslogan "Erdogan not welcome", agrupaciones kurdas, el movimiento antiglobalización Attac, La Izquierda y las juventudes socialdemócratas, protestaban por la visita de Erdogan.