Cientos de efectivos y expertos mineros trabajan sin descanso para rescatar a un niño de dos años que cayó a un pozo de 110 metros de profundidad en España hace tres días
PUBLICIDADIntensa operación de rescate a contrarreloj de un niño de dos años que cayó a un pozo en Totalán, un pueblo cercano a Málaga, en el sur de España.
Cientos de efectivos trabajan desde hace tres días para localizar a Julen, que se precipitó el pasado domingo por un agujero de 25 centímetros de diámetro y unos 110 metros de profundidad. La estrechez del pozo hace imposible a los servicios de rescate descender.
"Se ha encontrado un poco de pelo (en el pozo) y las pruebas de ADN realizadas por la Guardia Civil certifican que pertenece al niño", explicó este miércoles, el delegado del Gobierno en Andalucía, Alfonso Rodríguez Gómez, en la Cadena SER.
"Hay una esperanza de vida"
Se trata de la primera prueba de que el pequeño Julen se encuentra en este pozo. "Vemos un poco de luz", dijo el padre del niño, José, y añadió que él y la madre de Julen se sentían "muertos, pero con la esperanza de tener un ángel que nos ayude a sacarlo con vida".
Las autoridades siguen sin poder decir si el niño está vivo o no. "Hay una esperanza de vida que disminuye con cada minuto que pasa", dijo el martes Miguel Ángel Escaño, alcalde de Totalán.
La operación de rescate, sin precedentes en su dificultad según las autoridades, podría durar de 24 a 48 horas.
El acceso es muy complicado. Se están cavando dos túneles, uno paralelo al pozo y otro en horizontal. Pese a todo, no pierden la esperanza de encontrarlo con vida.
"Se va a empezar a crear una galería lateral para llegar a la misma altura de donde debe estar Julen, y luego, manualmente, un avión del ministro de defensa está trayendo un equipo de rescate de minas para que puede excavar manualmente las últimas partes del túnel, ha indicado el portavoz de la Guardia civil Bernardo Molto.
La excavación se inició después de que las máquinas empleadas para succionar la tierra bajo la que podría estar el menor encontraran una masa compacta a 73 metros de profundidad, que no se puede extraer.
"Siempre estamos trabajando con la idea de que Julen está vivo", ha insistido.
En la operación se aprovecha la pendiente de la montaña donde se encuentra este pozo, en un finca privada de la sierra de Málaga.
Tres planes para rescatar a Julen
Según las autoridades españolas, ésta es la alternativa más segura de las tres posibilidades que se estudiaban; las otras dos, la apertura a cielo abierto y la creación de un túnel paralelo al pozo, no están descartadas, sin embargo.
Hay tres factores que condicionan la operación: la seguridad del pequeño, emplear el menor tiempo posible y la complicada orografía, que dificulta los trabajos y su seguridad.
Los bomberos introdujeron una cámara que tocó tierra a unos 80 metros de profundidad. Ahí encontraron una bolsa de chucherías que llevaba el niño.
La perforación del pozo se hizo sin los permisos necesarios y el agujero estaba sin protección ni señalización. Julen se precipitó por el pozo cuando se encontraba jugando en una finca de su familia.
Los padres, José Rocío, feriante en paro, y Victoria María García, empleada en una cadena de hamburgueserías, perdieron a otro hijo, hermano mayor de Julen, hace pocos años, siguen las labores de rescate desde la zona, donde reciben atención de psicólogos.
Los reyes de España están pendientes de los acontecimientos. La reina Letizia conversó este lunes por teléfono con el alcalde para interesarse por las labores de rescate, solidarizarse con los padres y apoyar a los equipos de emergencia.