El segundo día de la cumbre contra la pederastia del Vaticano se ha centrado en la rendición de cuentas de los culpables. El arzobispo de Chicago ha reconocido la ceguera de sus autoridades y asegura que nadie puede ser castigado por estas denuncias.
La segunda jornada de la cumbre convocada por el Papa Francisco sobre la protección a menores contra la pederastia ha comenzado con rezos y la lectura de un testimonio más de otra víctima, sola ante la indiferencia de la Iglesia.
Este viernes el debate se centra en la necesidad de que los culpables rindan cuentas ante la justicia. Como ha indicado el Arzobispo de Bombai, la Iglesia no puede vivir en una realidad paralela.
"La Iglesia no vive en un mundo aislado de su propio proceder", ha señalado el Arzobispo de Bombai Oswaldo Gracias. "La Iglesia vive en el mundo y con el mundo. Quienes son culpables de comportamiento criminal deben rendir cuentas a las autoridades civiles por ello. Aunque la Iglesia no es un agente o un Estado, la Iglesia reconoce la autoridad legítima de la ley civil y del Estado".
Oswaldo Gracias, miembro del consejo que asesora a Francisco, ha asegurado que este tema supone un desafío complejo y sin precedentes que deben abordar unidos porque vivimos en un mundo global.
"Todos somos responsables"
"Ningún obispo puede decirse a sí mismo: 'Este problema de abuso en la Iglesia no me concierne porque las cosas son diferentes en mi parte del mundo, es solo un problema de Estados Unidos o Europa o Australia', ha continuado Gracias." Esto, hermanos y hermanas, simplemente no es verdad. Me atrevo a decir que hay casos en todo el mundo, también en Asia, también en África. Pero aunque seamos sinceros con nosotros mismos todos somos conjuntamente responsables".
"Reportar un delito no puede ser castigado"
Más contundente aún el arzobispo de Chicago, que ha hablado de la ceguera de las autoridades religiosas ante el daño causado y ha abogado por la transparencia en los proceso de denuncia contra obispos.
"Reportar un delito no debería estar prohibido por el secreto oficial ni por las normas de confidencialidad", ha afirmado el Cardenal Blase J. Cupich. "Ninguna persona debería ser discriminada o sufrir represalias por informar a una autoridad eclesiástica de una acusación contra un obispo".
Las monjas también abusan
En otro lugar de la capital italiana, la red de víctimas SNAP celebraba una rueda de prensa sobre un aspecto mucho menos conocido: los abusos cometidos por monjas, que podrían ser miles. Afirman haber pedido información al respecto al Vaticano que aún están esperando.
Mary Dispenza fue monja y víctima de otra religiosa.
"Como saben, ahora mismo se está prestando mucha atención a los abusos contra monjas por parte del clero. Y esto es bueno, algo muy esperado. Es impactante y es alarmante, pero aún tenmeos que ver la luz del día en torno a los miles de supervivientes que han sufrido abusos por parte de monjas".
Esta cumbre finaliza el próximo domingo con un esperado discurso del Papa. El Vaticano anuncia que se darán a conocer las medidas concretas para que todos los obispos sepan qué hacer para afrontar esta lacra.
Son muchas las víctimas que no acaban de creérselo.