Este domingo tendrán lugar unos comicios de resultado incierto.
Cuenta atrás en Moldavia para las elecciones parlamentarias. A menos de 24 horas para que se celebren los comicios, se suceden las acusaciones entre los diferentes candidatos.
La carrera es una contienda a tres bandas. El Partido Demócrata defiende su gobierno promoviendo un salario mínimo anual de alrededor de 675 euros a la par que niega las denuncias por corrupción.
La candidatura de los socialistas de Igor Dodon apuesta en cambio por estrechar los lazos con Rusia, mientras que la oposición proeuropea ACUM está liderada por la exministra de educucación Maia Sandu, que denunció haber sido envenenada en las últimas horas.
Los votantes elegirán representantes para los próximos cuatro años. Los últimos sondeos daban al Partido Socialista como la fuerza más votada, aunque no se espera un ganador absoluto.
Este sábado tuvo lugar en Chisinau una protesta en la que familiares de moldavos expatriados reclamaron su vuelta. Lo hicieron colocando sobre el suelo sus pares de zapatos. En los últimos años muchos han sido los que han abandonado Moldavia, buscando una mejor vida en la Unión Europea o Rusia.