El papa Francisco ha promulgado este viernes una nueva legislación, más dura, para prevenir y combatir los abusos sexuales a menores.
El papa Francisco continúa con su lucha contra la pederastia en el seno de la Iglesia y este viernes ha promulgado una nueva legislación, más dura, para prevenir y combatir los abusos a menores.
Por primera vez habrá una política unificada que se aplicará al personal del Vaticano y al de las nunciaturas con el fin de dar ejemplo a Conferencias Episcopales de todo el mundo e intentar erradicar los abusos por parte del clero.
En la nueva normativa se contempla la ampliación de la prescripción de los delitos de abusos a 20 años o la obligación de denunciar ante las autoridades y cooperar con ellas en caso de conocer algún delito de este tipo.
Quien no lo haga o entorpezca la investigación, además, tendrá sanciones que podrían suponer el despido para los encubridores.
También se pondrá en marcha un servicio de asistencia para las víctimas de abuso, en el que se ofrecerá ayuda médica y psicológica.
Esta nueva normativa entrará en vigor a partir del uno de junio de este año.