Vladímir Putin preside el desfile, reinstaurado por el mismo en 2003 y avisa de que las fuerzas navales "están preparadas para responder a cualquier agresor exterior".
PUBLICIDADRusia muestra al mundo su poderío militar. Más 80 barcos y aviones y unos 4.000 militares han participado este domingo en el día de la Armada que se ha celebrado en San Petesburgo. Allí han estado embarcaciones procedentes del Mar Negro, del Báltico, del Mar del Norte y del Pacífico, ademas de los del Caspio, a los que se ha añadido la fuerza aérea del enclave.
Vladímir Putin dijo que la Marina de Guerra de Rusia "garantiza la seguridad del país, sus intereses nacionales y es capaz de responder sólidamente a cualquier agresor".
El jefe de Estado ruso indicó que la Armada rusa figura entre las primeras en incorporar equipos de última generación y que Rusia seguirá construyendo "una flota de capacidades únicas, una flota propia de una potencia soberana y fuerte", según la agencia RIA Nóvosti.
Putin ha anunciado quince nuevas incorporaciones parala flota este mismo año. "Nuestra Armada garantiza con confianza la seguridad del país, sus intereses nacionales y la capacidad de dar una respuesta adecuada a cualquier agresor. La garantía de esto son nuestras armas únicas. Pero lo más importante es el coraje y el entrenamiento de las tripulaciones navales", ha dicho el presidente.
El jefe del Estado ruso pasó revista a una alineación de grandes buques de guerra en la base naval de Kronstadt, en la bahía del Nevá del golfo de Finlandia.
El desfile naval contó con la participación de 43 embarcaciones militares y 41 aeronaves, e incluyó tanto los buques recién incorporados a la Armada rusa como los que llevan años en servicio, entre ellos la fragata Admiral Kasatonov, la corbeta Gremiaschi, los buques portamisiles Mitischi y Serpukhov, o el destructor antisubmarino Severomorsk.
El día de la Armada rusa fue instaurado en 1939 pero se suspendió 61 años después.
Putin hizo que resurgiera en 2003, un síntoma claro de su afán porque el país recuperara protagonismo en el tablero internacional. En los últimos años se han celebrado desfiles en ciudades de la Crimea anexionada y en la base naval que Moscú tiene en el puerto de Tartus. Hace dos años, por primera vez en la historia moderna, el acto se realizó bajo las directrices del actual presidente.
El desfile, con un gran despliegue de poderío militar y patriorismo atrajo a miles de aficionados y curiosos.
Se da la circunstancia de que el mismo día se produjeron más de 1.400 detenciones en las protestas contra el Gobierno en Moscú.
