Este sábado las autoridades dispararon gas lacrimógeno y usaron cañones de agua contra los ciudadanos que protestaban contras los excesos de los métodos policiales.
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La muerte del joven Steve Canico ha despertado la cólera de la ciudad francesa de Nantes.
Este sábado 3 de agosto, las autoridades dispararon gas lacrimógeno y usaron cañones de agua contra los ciudadanos que protestaban contras los excesos de los métodos policiales.
Algunos manifestantes con pañuelos en sus caras levantaron barricadas y prendieron fuego a escombros lo que dejó algunas vías de tránsito totalmente inaccesibles.
Los llamados chalecos amerillos también estuvieron presentes en un gesto de apoyo.
A media tarde alrededor de 40 personas habían sido arrestadas, informó la policía francesa.
Steve Canico tenía 24 años cuando desapareció a finales de junio durante las festividades de la fiesta de la música
En el concierto, la policía desató un operativo de despliegue contra los presentes donde varios cayeron en el río Loira, entre ellos Canico, que fue encontrado esta semana a las orillas del río.
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